“Y si canto de este modo
por encontrarlo oportuno
no es para mal de ninguno
sino para bien de todos”.

Martín Fierro

(José Hernández 1834-18969)

La desfiguración de los Políticos en el trascurrir del tiempo,  en el desarrollo de su participación en la búsqueda del poder o estar dentro de los círculos de ese poder (porque hay niveles), es evidente.
Desde ejercicio del poder hegemónico del Partido que sostuvo o sostiene, lo que Vargas Llosa catalogó como la dictadura perfecta, donde antes de designar o de destapar al tapado, los grupos al interior de ese partido hacían sus planes con quien pensaban que sería el bueno y que sin “problemas” llegaría a la Presidencia de la República y desde allí se daban en cascada las designaciones de todos los demás niveles de gobiernos (Estatales y Municipales) y si no se alineaban  -que era muy raro- eran sustituido por el Tlatoani en turno. Era él quien otorgaba los “Virreinatos” (Los Jefes de Gobierno); aquellos que se equivocaban de personaje, inmediatamente se alineaban con el ungido por su antecesor y todos contentos en la fiesta del aquel carro completo. O sea todos daban sus…manos a torcer.

Con la hasta ahora fallida alternancia del poder, en todos los niveles de gobierno, donde tres y ahora cuatro de los principales partidos se enfrascan en la lucha del poder, se han logrado ciertos cambios, pero no han logrado desligarse de personajes del “viejo” sistema, siempre enlodado por la corrupción, por más que tratan de aparentar que no. Por eso, ha sido una alternancia fallida (claro hay otras situaciones del por qué).

Con el pluripartidismo, se ha llegado en nuestro País a una clara “promiscuidad política” ya que ciertos “notables personajes” de todos los partidos, cambian de militancia con la naturalidad de quienes seguidamente se bajan sus prendas interiores con el mejor postor y nulo pudor, para conseguir sus fines propios o de su grupo. Acuerdan con los opositores bajo la mesa, para no perder posicionamientos o concesiones. En un sentido figurado (aunque puede ser realidad), duermen o se acuestan con el “enemigo” sin pudor, cínicamente.

Estos promiscuos personajes o grillos cirqueros por lo general, mandan tocar y cantan en diferentes partidos y lo malo es que la militancia nativa de los  distintos Institutos Políticos a donde se van brincando, bailan al son que ellos tocan, o sea se adueñan de los partidos y de la voluntad de sus agremiados, prostituyendo a algunos.

Partidos como el PRD, por cierto ya auto digerido por sus mismos militantes, pagó el precio de su nacimiento, concebido por Priistas inconformes y la izquierda de esa época casi desbalagada; de ellos se engendraron el PT, ex Convergencia-sinvergüenza- PMC y el actual MoReNa. Este último ha sabido capitalizar bien la infidelidad de estos, alguna vez ” honorables”, miembros de los partidos de donde emigraron y el mesiánico líder les ha dado una generosa acogida (bueno pues, bienvenida para castos oídos, que pueden escuchar mal).

Por supuestos algunos “frágiles miembros” del Panismo también han sucumbido a estos “orgiásticos acercamientos” en busca, sino del poder, cuando menos a un “honroso” podercito, para sobrevivir de la política en una “honrosa medianía” y se dirán “algo es algo, aunque sea la puntita… de la ubre.

En las elecciones pasadas, sobre todo en el Estado de México, esta promiscuidad Política fue notoria entre el PRI, PRD y PAN. MoReNa, está constituido en su mayoría a base de esa promiscuidad. Un solo ejemplo de personaje: Manuel Bartlett Díaz  aquel a quien se le cayó el sistema e hizo “ganar” a Salinas y ahora ¡Por fin lo declara” que no ganó (A POCO)…que promiscuo tan cínico o ¿ qué cínico tan promiscuo? Aunque hay más, de esos que dicen “es de humanos cambiar de opinión”. ¿Pero a cada momento? Y de color de calzones. Que alguien me explique dijo Eugenio Derbez.

En lo personal, como militante del PAN me produjo una pena ajena,  esa comparsa de PRIRDAN, más los partidos rémoras del PRI (Verde, Panal y puede que el ex convergencia, el ahora también promiscuo Partido Movimiento Ciudadano, estuvo en esa fiesta del flojito y cooperando).

Ciertamente el Comité Ejecutivo Nacional debe dar una real explicación de lo que pasó en el Estado de México.

Muchos compañeros militantes del PAN me dirán que la ropa sucia se lava en casa. Pero debemos saber que esto no aplica para las Instituciones Orden Público, como son los Partidos Políticos y que se deben de transparentar sus acciones. La ropa sucia de los partidos efectivamente se deben lavar al interior, con una autocrítica constructiva y una vez “lavado lo que está o estaba sucio”, mostrarlo limpio a la ciudadanía. Es la única forma de avanzar a una verdadera democracia en nuestro País. La promiscuidad política no solo es una falta a los principios de partido; es una carencia de una verdadera convicción política.

Lo dicho,  Parodiando a Martin Fierro: “…no es para mal de ninguno, sino para bien de todos”. Comportémonos.

#PARACAMBIARYOMEINCLUYO.