"Un policía saca a pasear su chaleco antibalas", así podría titularse el pie de la foto aquí publicada, pero lo correcto debe ser: Chalecos antibalas representan una carga que no cualquiera puede soportar.

Como este policía que decidió cargar su chaleco en la parrilla de la motocicleta, no llevarlo puesto porque, dice, "es demasiado pesado, entre 16 y 18 kilos, y causa dolor de espalda".

Uno supone que este escudo es para usarlo cuando hay peligro, un enfrentamiento a balazos con delincuentes, no para traerlo puesto durante toda la jornada de trabajo.

Pero si pesa tanto, eso puede ser un impedimento para que el policía pueda moverse con la agilidad que requiere una situación de peligro.

El entrevistado asegura que hay otro tipo de chalecos, más delgados y resistentes, pesan menos, pero de esos no tiene la corporación.

Y ni  modo, éste les tocó, hay que traerlo y llevarlo, órdenes son órdenes.

Foto e información proporcionada por Rosendo Arrayales.