Con el fin de que en la próxima diseminación del cultivo de trigo, los productores establezcan la misma densidad de siembra en el cereal, el Patronato de Investigación y Experimentación Agrícola del Estado de Sonora, PIEAES y el Inifap, recomiendan establecer entre 100 y 200 kilos de semilla por hectárea.

Rodolfo Elías Rodríguez Flores, presidente del Pieaes, dijo que el propósito de sembrar esas dosis de semilla, es evitar los problemas de acame que se presentan entre marzo y abril y que representan un costo enorme para los productores del cereal.

Dentro de las variedades Cirno, Quetchehueca, Baroyeca y Ceneb, se está recomendando establecer entre 100 y 200 kilogramos de semilla por hectárea, en el caso de la primera semilla (Cirno).

En el caso de Quetchechueca se recomienda de 89, 133 y 177 semillas por hectárea, en Baroyeca 89, 134 y 179 y Ceneb 88, 132 y 176 simientes por hectárea.

Rodríguez Flores, dejo en claro que las recomendaciones son de INIFAP dentro del Programa de Trigo, por lo que estas son sugerencias de los kilogramos por hectárea convenientes a sembrar, según la variedad y su tamaño de semilla. 

“Esto es con el fin de establecer la misma densidad de siembra por metro cuadrado y así evitar el factor de acame por exceso de población,  y esperando que este ciclo 2018-2019 sea benévolo y se logren rendimientos que cubran sus expectativas”, puntualizó.