A través de caleidoscópicas imágenes, amarillo, oro, verde, blanco, tinto azul de colibrí, mismas que parecen levantar el vuelo desde amplios muros que relatan la experiencia vital de Ojo y Piquín; un par de colibríes, con destinos diferentes, pero unidos en el amor, la empatía, el cuidado y la atención que convergen en la inclusión, inicia un proceso de transformación urbana para llevar al municipio a convertirse en un Cajeme al 100.

Este es el primero de cien callejones que serán remozados para transformarlos en corredores culturales.

"El Callejón de la Inclusión, el callejón Haití, cuenta una historia que sensibiliza en el tema de la inclusión, por esos mis felicitaciones a todos aquellos involucrados en este novedoso proyecto", expresó la Alcalde Mariscal Alvarado.

Aclaró que Cajeme al 100, no sólo contempla el rescate cultural de cien callejones, sino que es un programa que inicia en este 91 aniversario del municipio, pero que tiene como finalidad extender sus obras hasta la celebración del Centenario.

Después de que el párroco Miguel Agustín Durazo Arvizu, realizó la ceremonia de bendición, se hizo un recorrido y explicación por parte de la coordinadora del proyecto, Lupita Humildad, sobre el contenido de cada uno de los murales plasmados a lo largo del callejón Haití, entre 200 y 6 de Abril.

Coaboradores:

Como muralistas, Edda Chávez García, Oscar Alan Escobedo Cabreras, Angélica Rojas Pablos, Graciela Galaz Vargas, Sandy Mendoza, Francisco Javier Hernández Félix, Víctor Ramírez Ramos, y Ebeth Roldán.

Murales en Braille, Daniela Cebreros y Cristina Lizbeth Cárdenas Ruiz.

Arquitectos, Martha García y Juan Reyes.

Títulos en Braille, Siria Padilla.

Escritor del cuento, Javier Hernández Félix.

Cuenta cuentos, Francisco Aarón Muñoz.