Productores agrupados en la Unión Nacional de Organizaciones Campesinas (UNORCA) propusieron la creación un Plan Emergente para la Producción de Maíz, a través del cual se incrementen las cosechas de este cereal.
Olegario Carrillo, dirigente de UNORCA, sostiene que a través de este Plan se incorporarían dos millones de hectáreas para la siembra del grano, una iniciativa de ley antimonopolios para evitar el acaparamiento y los incrementos de precios en básicos, y se reducirían costos de producción.
“Se trata de una ley antimonopolios que vaya a fondo, completa, para que haya responsables y castigue también a los que omiten aplicar la ley.
El dirigente de la organización campesina con presencia en 26 estados destaca a aplicación del artículo 183 de la citada Ley en las 50 principales zonas productoras de maíz.
La UNORCA propone además que 70 por ciento de los recursos del sistema financiero rural se destinen al plan emergente y llegue en forma prioritaria a los productores que poseen menos de cinco hectáreas y a las empresas rurales.
Plantea además la creación de un fondo de alimentos con los excedentes petroleros, pues aunque estos recursos se transfieren a los estados, los productores y organizaciones campesinas no reciben los beneficios, los cuales -sostiene- se canalizan a criterio de las autoridades en las entidades.
Dijo que es necesario rediseñar las reglas para la aplicación de los subsidios con la participación de todo el sector.
Castillo Meza refirió como ejemplo que tan sólo el año anterior algunos estados como Sonora, Sinaloa, Tamaulipas y Jalisco recibieron 52 por ciento de los recursos autorizados de Alianza para el Campo.
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