Publicado en Diario del Yaqui el lunes 12 de febrero del 2001
1. La semana pasada se produjo, a nivel gabinete presidencial, una declaración que debe de enorgullecernos a los cajemenses; se dijo que el gobierno de Vicente Fox tomaría como modelo el Instituto de Crédito Educativo en Sonora para financiar la carrera de los estudiantes sin recursos. El Presidente anunció muchas veces (yo se lo escuché personalmente en Magdalena y en Hermosillo), durante su campaña, que al llegar al poder promovería la creación de preparatorias en poblaciones apartadas y que daría facilidades a los estudiantes pobres para cursar estudios profesionales.
2. Pero, como se ha visto en otros renglones de la administración, resulta muy difícil cumplir las promesas de candidato cuando los recursos económicos con que cuenta el gobierno son tan limitados; y lo eran mucho más en los setenta, cuando el Instituto Tecnológico de Sonora daba un paso para adelante y.... ninguno para atrás, hasta eso, pero tarda demasiado en avanzar los siguientes por el escaso apoyo económico. Ahora hay de dónde agarrar, modelos que imitar; hace tres décadas, nada; era necesario inventar, crear. Y a Eduardo Estrella Acedo, director general primero, y luego primer rector del ITSON, se le encendió la imaginación.
3. Creó el Fondo de Crédito Educativo a puro valor mexicano porque el gobernador Carlos Armando Biébrich, a quien le expuso la idea, andaba en la otra dimensión; la de la frivolidad y la política nacional, y el rector de la Universidad de Sonora, Alfonso Castellanos Idiáquez, celoso, no lo dejaba que volviera la cara hacia el sur. Se obtuvo crédito de un banco y se comenzó a operar con estudiantes locales. Para alivio de Estrella y para sorpresa de los que habían dudado de su iniciativa, no sólo hubo excelente respuesta en cuanto a solicitudes sino también en la recuperación inicial de los créditos.
4. En 1979 el ITSON perdió un gran rector y el Estado ganó un magnífico secretario de gobierno. Eduardo Estrella aceptó la invitación del gobernador Samuel Ocaña García para integrarse, con esa posición, a su gabinete. Y como genio y figura de maestro hasta la sepultura, según dice el refrán popular que declaramos en este momento modificado, a las primeras de cambio Estrella le presentó a su jefe la iniciativa para crear el Fondo de Crédito Educativo del Estado de Sonora. Pocos años después, afinada la legislación respectiva y fortalecido financieramente, se convirtió en Instituto.
5. En la actualidad, alrededor de 56 mil sonorenses, hombres y mujeres, han recibido el apoyo del ICE, y tal vez nos quedamos cortos, y eso que algunos miles de beneficiarios viven aquí. El financiamiento alcanza montos distintos, según la ciudad de la República o del extranjero donde el acreditado cursa su carreta; hay profesionales con licenciatura que realizan estudios avanzados fuera del país y reciben cheques en dólares. El Instituto funciona con precisión de computadora.
6. Ahora que la administración federal se propone repetir este modelo a nivel nacional para ofrecer a los jóvenes del resto del país la prerrogativa de que hace tanto tiempo disfrutan los de Sonora, intuimos la posibilidad de que, convertido en Instituto Nacional de Crédito Educativo, se multiplique y crezca tanto, que terminará por perderse, para las generaciones futuras, la memoria de cómo y dónde nació la idea, y cómo y contra cuántas dudas y dificultades la defendió y sostuvo el cajemense: Pero eso el periodista da fe aquí de lo que consta.
7. “No es un hombre más que otro si no hace más que otro”, enseña Cervantes por boca de Don Quijote. Eduardo Estrella Acedo ha sido un ciudadano que a lo largo de su vida ha construido –como profesional del Derecho, como maestro, como político--, y que podría responder a la afirmación cervantina como diversos argumentos. Mas no parece que bastará, para justificar el sitio distinguido que tiene en la historia de Sonora, la iniciativa de haber creado esta generosa institución de crédito, que desbroza el camino a los universitarios. Es un orgullo saberlo cajemense, y un honor compartir su amistad.
CARLOS MONCADA O.