Trabajadores de las plataformas digitales Uber y Didi dedicadas al servicio de entregas de comida a domicilio hicieron un plantón de protesta frente a Palacio Municipal donde expusieron la inseguridad en la que desempeñan su labor.

Son aproximadamente 500 personas las que se dedican a este servicio, dijeron.

Sólo el día de ayer jueves, mencionaron, seis repartidores fueron asaltados por sujetos aún no detenidos.

Esto se ha vuelto común sobre todo cuando deben acudir a entregar un pedido en colonias periféricas pero también les puede ocurrir en domicilios del centro de la ciudad y a cualquier hora, mañana, mediodía o noche.

Anteriormente ya han manifestado su inconformidad por esta situación pero hoy, dijeron, se ha llegado a una situación muy difícil por lo que han decidido alzar la voz ante las autoridades.

Señalaron que también las autoridades los perjudican cuando por cualquier motivo les quitan la motocicleta.

Sin embargo ninguno de los manifestantes quiso ser citado en término personales.