La presencia de microplásticos en el proceso de desalación del agua podría hacer inviable esta tecnología que se presenta hoy como alternativa ante el impacto de sequías crecientes.

Investigadores del ITSON y de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) un proyecto conjunto para detectar microplásticos en plantas desaladoras ubicadas en Sonora.

El Dr. Germán Dévora Isiordia explicó que dicha investigación tiene como objetivo realizar monitoreos sobre la calidad del agua, para detectar los microplásticos y dar certidumbre de que la calidad del agua sea segura para el consumo humano. 

“No hay estudios profundos sobre la presencia de estos microplásticos, pero si los hay pueden provocar taponamientos en las superficies de las membranas lo que implicaría que bajen los caudales, se pierda la calidad del agua, aumente la presión, aumente el consumo energético y el costo por metro cúbico de agua permeada se incremente haciendo inviable el proceso”, precisó el investigador del ITSON. 

Los puntos de muestreos de Plantas Desaladoras Ósmosis Inversa se llevarán a cabo en las plantas de Constellation Brands, SARDISON, Punta Chueca y Empalme-Guaymas. 

Allí los investigadores realizarán muestreos permanentes para buscar la presencia de microplásticos en agua del mar y cómo podrían afectar a las plantas desaladoras.