Septiembre, último mes del verano, el eje terrestre se inclina y da paso al otoño. La atmósfera está cargada de calor y humedad.

Los ciclones que al inicio de la temporada se dirigían de manera franca hacia el Océano Pacífico, siguen ahora una trayectoria paralela a las costas mexicanas más arriba del Trópico de Cáncer.

Septiembre ha sido históricamente el mes en el que se acercan y a veces llegan ciclones al territorio sonorense.

En el pronóstico actual ya se observa la evolución de uno con dirección paralela a las costas del noroeste. Esto no significa por supuesto que pueda entrar al Golfo de California, pero en las próximas tormentas tropicales crecerá la posibilidad de que sí ingresen.

La etapa de mayor incidencia ciclónica en esta región es la segunda quincena de septiembre. Pero esto no es infalible, igual puede no entrar ninguna tormenta a nuestra región, como ha ocurrido en la mayoría de los años.