Aunque es notable el interés del gobierno federal y del de Sonora el aprovechamiento intensivo del litio y poner trabas a la inversión extranjera si arriba con el propósito de birlarnos el tesoro, y aunque es sonorense el director de la empresa estatal que vigilará la correcta explotación, siento que falta más difusión a lo que de este metal se sabe para que el pueblo sonorense participe con responsabilidad en cuidarlo.
Ayer se inició aquí el Congreso Internacional Minero que se extenderá hasta el día 21. En el suplemento que El Imparcial anexó a su edición ordinaria, leo que “es de suma importancia para nosotros que la población conozca todos los beneficios de esta gran industria: la minería es el inicio de todo, es esencial para vivir”. Esto lo dijo el presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México Distrito Sonora.
En consecuencia, leí todo el contenido del suplemento en espera de encontrar información seria sobre el litio y no la encontré. La que he visto en los medios locales de comunicación es pobre y escasa. Es de esperarse que surja en el desarrollo del Congreso.
Por si eso no ocurre, me propongo localizar un texto que ya circula en nuestras librerías, sobre la política de explotación del litio, que es al fin de cuentas el tema que más nos interesa.
LA HORA DE LOS NOTARIOS
Ha pasado la aduana del dictamen de la comisión de diputados una iniciativa de Ley que sin duda será aprobada por el Pleno, que limita las facultades del titular del Poder Ejecutivo para nombrar notarios.
Hace muchísimo tiempo que los gobernadores regalan notarías a los abogados que los han apoyado en sus tropelías, o porque es ayudaron en campaña, son sus familiares o simplemente porque son sus cuates. Un caso notorio, entre muchos, fue el nombramiento de director de Notarías que el gobernador Padrés dio a Octavio Gutiérrez Gastélum, aunque carecía de patente de notario. Con el nombramiento en la mano, no sólo la consiguió sino que puso a su esposa como suplente para que las funciones notariales, en cualquier caso, quedaran en familia. Hubo también al menos un caso de gobernador recto: Eduardo Bours se negó a regalar notarías.
Es positivo, pues, que los diputados pongan obstáculos a las designaciones por conveniencia política. Pero ya que están manejando el asunto, es recomendable que también pongan coto a las notarías familiares. Un notario pone a su hijo a estudiar Derecho, le da chamba en su despacho para que aprenda el oficio, lo designa sustituto, pide licencia cuando se siente viejo y como son bastantes sus colegas que han hecho la maniobra, no le falta ayuda para que la patente pase a manos de su heredero, esté capacitado o no lo esté para ello. Si los diputados estudian este aspecto con viejas mafias. Hay que armarse de valor y atacar.
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