Un grupo de personas que se dedican a la venta de cuetes y pirotecnia en general se presentó en Palacio Municipal para exigir que se cancele la prohibición de la venta de estos artículos durante el presente mes de diciembre.

Dicha prohibición fue establecida en la reciente sesión del cabildo cajemense por los regidores.

Los vendedores de pirotecnia argumentaron que esta actividad es un ingreso importante para las 300 familias que cuentan con permisos municipales concedidos desde el 2018.

Por este permiso han pagado 6 mil pesos más 5 mil que deben entregar a Protección Civil.

Señalaron asimismo que han sido capacitados por Protección Civil para el manejo de dichos artículos con las precauciones necesarias a fin de evitar cualquier riesgo para ellos y los clientes.

Expresaron también que aun cuando ellos son un grupo de 300 personas con permisos, en años recientes los vendedores que llegan de fuera con permido federal hacen que los puestos lleguen a casi 3 mil en todo el municipio.

Por parte de la autoridad municipal se anunció que en los próximos días habrá una reunión con los manifestantes pues la prohibición se basa en algo más importante, como es la protección de niños con autismo y mascotas que sufren ataques de ansiedad por la explosión de cuetes.