Los desaparecidos no son una percepción más. Son el llanto desgarrador, el dolor permanente de sus seres queridos que los buscan, los buscan y los siguen buscando sin importar la indiferencia social ni el bostezo burocrático de autoridades.

Sólo en lo que va de este año, de enero a abril, el colectivo Rastreadoras de Cd. Obregón registra 20 mujeres y 70 hombres desaparecidos. Muy pocos han regresado y lo común es que regresen golpeados, con traumas físicos y sicológicos que nunca superarán, afirma Nora Lira. 

La dirigente de las Rastreadoras acompañó este miércoles a los familiares de hombres desaparecidos, “porque ellos también desaparecen”, no sólo las mujeres por las que se han manifestado anteriormente. 

Escucha hermano.. hijo… padre… tu familia está en la lucha por encontrarte…

Con un nudo en la garganta, con lágrimas, clamaban los manifestantes a la vez que levantaban la cartulina con el rostro impreso del desaparecido.

Las autoridades de todo tipo dirán por adelantado que los desaparecidos son los culpables de su situación “por andar en malos pasos”, una afirmación irresponsable que se complementa con la sugerencia o a veces la declaración contundente que atribuye a las familias un grado de responsabilidad “por no cuidar a sus miembros”.

“Las investigaciones no avanzan, las detienen, sólo van con los vecinos y les preguntan algo, eso es todo...”, comenta Nora Lira en entrevista con Sofía Ortega¨.

Los colectivos de búsqueda son la única esperanza de las familias, dice y reconoce que la Fiscalía de Justicia ha contratado especialistas asignados a este problema, pero no están en activo, la mayor parte del tiempo permanecen detrás de un escritorio.

Desde que Nora inició esta actividad de búsqueda, en 2018 tras la desaparición de su hija, suman alrededor de 1,500 desaparecidos en Cajeme y podría haber más pero muchas personas no presentan denuncia ni se suman a la búsqueda por miedo o por amenazas.

En medio de este infierno, surgen encuestas que aseguran una reducción insignificante de la percepción de inseguridad pública por parte de los cajemenses. Y las autoridades lo celebran.

Nora Lira comenta:

“No estamos mejor ahora que antes, creo que son cifras maquilladas… Además sólo celebran la mejoría de la percepción ciudadana”.

Mejora la imagen. Eso al parecer es lo único importante para las autoridades.