Las áreas deportivas de Cajeme podrían estar en muy buens condiciones si se les destinara el recurso que el Club Yaquis debe al Ayuntamiento por uso del estadio de beisbol, una deuda de casi 20 millones de pesos, afirmó el alcalde Javier Lamarque Cano.
"Necesitamos esos recursos, que no estamos recibiendo", precisó.
Lamarque señaló que el Ayuntamiento podría demandar al Club mas prefiere la negociación para no dejar a la ciudad sin beisbol profesional.
La directiva de Yaquis ha amenazado con llevarse al equipo a otra ciudad si las autoridades insisten en cobrarle la deuda que tiene por la concesión del estadio.
"Están abusando de la buena fe del Ayuntamiento", comentó.
Esta relación conflictiva con los directivos del beisbol ha impedido además concesionar el nombre del estadio (naming) a una firma empresarial, lo que permitiría obtener importantes ingresos para destinarlos a la infraestructura deportiva del Municipio.
Por otras parte, las obligaciones que el Club Yaquis se comprometió a pagar con publicidad durante los partidos cada temporada tampoco se cumple de manera cabal pues se le da mucho tiempo a los anuncios de empresas comerciales y sólo de vez en cuando a los del Ayuntamiento, agregó Lamarque.
"También estamos exigiendo que la publicidad se haga efectiva. No hay equidad, no hay correspondencia".
Reconoció como una medida positiva disponer del área de bleachers en el estadio para la asistencia gratuita de niñas, niños y jóvenes de escasos recursos.
Además refirió la prohibición dentro del estadio de privilegios para los funcionarioz, "nada de pases de entrada ni palco especiales; el funcionario que quiera ir al beisbol que pague con su dinero el boleto".