El científico Rafael Lara registró por primera vez la lagartija Anolis sagrei en el noroeste de México, específicamente en Sonora.

Este reptil es nativo de Cuba y las Bahamas, pero  su distribución se extendió a diversas partes del mundo, como en Ciudad Obregón.

El ejemplar es un macho adulto, estos tienen una forma proporcional, no excesivamente grande ni alargada.

La papada es de color amarillo anaranjado a rojo anaranjado con bordes amarillos.

El reptil es de patas largas, la cola está comprimida lateralmente y tiene una cresta de escamas agrandadas, que es más visible en los machos.

En el vientre tiene escamas con una quilla de ligera a moderada y son supracaudales del mismo tamaño.

En el informe, el  herpetólogo resalta que visitaron dos veces un vivero de Cajeme, el 25 de abril y el 4 de mayo.

En el lugar encontraron casualmente las lagartijas y fueron identificadas utilizando caracteres de diagnóstico.

Proyecto Puente