El Festival Alfonso Ortiz Tirado comenzó oficialmente este viernes, según el suplemento de El Imparcial, suplemento que supongo fue supervisado por las autoridades culturales. Opino que este Festival, que hace rato ostenta prestigio internacional, debería superar la fase de entretenimiento y diversión y convertirse en fuente superior de cultura.

Hace unos años, cuando apenas se abría en la UNISON la licenciatura en Arte, Opción Canto, los estudiantes asaltaban a los cantantes profesionales en busca de orientación. Ahora lo pueden hacer también, con el añadido de que les será posible acudir al Centro Comunitario Nelita de Bours para estudiar libros de música y escuchar allí las sinfonías y las óperas que aparezcan en los programas, o cualesquiera otras, ya que el Centro cuenta con centenares de discos.

Pero primero lo primero. Hay que dar a la gente información correcta. En el citado suplemento dice que el Festival comenzó en 1984 (pág. 5) No es cierto. En 1984 se decretó la creación del Museo Costumbrista y en 1985 tuvo lugar en éste la primera velada en recordación del doctor Ortiz Tirado. Sólo una velada, unas horas de canto. Ahora le llaman festival pero los dos tres primeros años consistió en música por una noche.

En la 6 dice que el barítono Jesús Suaste debutó con la ópera de Verdi “Un ballo in machera “. Lo correcto es “Un ballo in maschera”, Un baile de máscaras. Quien redactó el párrafo debió aprovechar la oportunidad para informar que Suaste ya cantó en el FAOT, pero no se le ha de exigir a nadie que informe lo que no sabe. Lo que es imperdonable es que publiquen (pág. 15) que el FAOT del año pasado dejó una derrama de 49 mil 890 millones de pesos. Repito: 49 MIL 890 MILLONES DE PESOS. Con esa fortuna hubieran hecho un verdadero teatro en Álamos, o veinte teatros, no faltaba más.

Para que el FAOT se convierta en auténtico centro de cultura es necesario también preguntar a la Rectora, y en su oportunidad a quien venga a ocupar su cargo, si de plano ha renunciado la Universidad a cultivar el canto operístico como en vida lo hizo el añorado Jesús Li. Y de ser afirmativa su respuesta, como creo, buscar quién se anime a cumplir esa misión desde hace años abandonada.

(Jesús Suaste vino también a Sonora para cantar en una de las producciones de Li)