Con el fallecimiento de la Gilbertona se comprueba la enorme pobreza social del mexicano.

Es verdad, toda muerte es lamentable, pero esta efervescencia social en la algarabía es impulsado por la mediocridad en una sociedad igual de mediocre.. qué lamentable este nivel de educación de nuestro pueblo fanático y consumidor de basura.. donde es más fácil enaltecer a quien se convierte en el espejo de la misma basura

Ojalá algún día de igual manera se despidiera de la vida a algún científico mexicano, como la muerte en el 2020 del Premio Nobel de Química; el mexicano Mario Molina, que lamentablemente nadie tomó en cuenta..

Dice un dicho: al pueblo pan y circo... eso es precisamente lo que mantiene taponeado el cerebro de muchos mexicanos.. y así los políticos mantienen su poder en esta enorme plataforma de ignorancia, con mentiras y payasadas y el pueblo  riéndose de las babosadas, sintiéndose reflejado en su propio lenguaje..

Por eso estamos como estamos.. un gran círco que se repite campaña tras campaña.