El piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez (Red Bull), explicó las razones de su falta de ritmo en el Gran Premio de Australia de la Fórmula 1, donde tuvo que conformarse con finalizar en quinta posición y donde su compañero de equipo, el tricampeón neerlandés Max Verstappen, abandonó la prueba en los primeros giros.
"Fue una lucha por la supervivencia con la degradación (en los neumáticos)" que tenían; y que "no" estuvieron "a la altura de Ferrari y McLaren".
"No creo que haya sido un fin de semana ideal para nosotros, porque desde el viernes tuvimos problemas con las tandas largas; y buscamos nuevos compromisos con miras al sábado, pero no logramos obtener un control total de la situación", explicó 'Checo', nacido hace 34 años en Guadalajara (Jalisco), con seis victorias y 37 podios en la F1.
"En la primera tanda ('stint') el balance fue súper neutral, no tenía agarre en la parte trasera, por lo que destrozamos los neumáticos traseros; y luego, en la segunda destrocé por completo los delanteros", explicó el bravo piloto tapatío, que ahora es tercero en el Mundial, con 46 puntos, cinco menos que el líder, su compañero, el neerlandés Max Verstappen, que este domingo abandonó por una avería de frenos.
De igual forma, el piloto tapatío lamentó que no pudieron estar a la altura de dos de sus competidores como Ferrari o McLaren.
"No fue agradable, el balance ahí afuera; fue una especie de lucha por la supervivencia debido a la degradación que teníamos; y no estuvimos a la altura de Ferrari y de McLaren", explicó 'Checo' este domingo en Melbourne.
Por último, la sanción recibida por parte de Pérez en las qualys fue algo que le perjudicó al nacido en Jalisco.
"La sanción en parrilla (pérdida de tres puestos) también nos perjudicó, porque sin ella podíamos haber acabado algo más arriba", opinó.
"Creo que hoy todo dependía de la pista, así que esperemos que en Japón volvamos estar de nuevo en lo más alto", añadió el mejor piloto de la historia de México tras acabar quinto en Albert Park.