El segundo debate de candidatos a la Presidencia de la República fue como el primero, no hubo variación ni sorpresa alguna que permitiera modificar la percepción general sobre las tres personalidades enfrentadas, sus propuestas o la habilidad discursiva de cada uno.

Las promesas de los tres candidatos presidenciales no enriquecieron el segundo debate, mientras que el intercambio de ataques personales sólo sirvió para alimentar el morbo de sus seguidores.

Como era de esperarse Claudia Sheinbaum destacó los avances de la 4T y mantuvo su expresión monótona, Xóçhitl Gálvez intentó lucirse como pendenciera y Álvarez Máynez bien gracias. 

Fue más de lo mismo que vimos en el primer debate, incluyendo el formato rígido que no permite consolidar una opinión positiva del por qué ésta o aquél debe ser presidente de México. 

¿Quién ganó el debate? La respuesta es fácil: Lo ganó cada uno, según sus seguidores. 

Fue un debate más como las peleas del "Canelo" Álvarez: Largo, aburrido y sin contundencia.