A pesar de ser esencial para preservar la salud y la vida, el agua puede también convertirse en una amenaza cuando se consume en exceso.
Tomar ocho vasos de este líquido al día no siempre es recomendable para la salud y beberla no necesariamente ayuda a bajar de peso.
En los últimos años se ha incrementado el consumo de agua en la población.
Datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señalan que en México se consumen 17 mil 700 millones de litros de agua por año, por lo que actualmente nuestro país ocupa el segundo lugar, a nivel mundial, con 169 litros de consumo de agua embotellada por persona, anualmente.
Yesenia Barrientos, jefa del Departamento de Nutrición del IMSS, dijo que es importante informar a la población acerca de los mitos sobre el consumo de agua.
Existe la percepción muy extendida de que el agua ayuda al organismo a estar en mejor forma sin
consecuencias negativas para la salud; dijo, lo cual es cierto siempre y cuando sea consumido de manera responsable.
Uno de los mitos más extendidos, y por mucho el más dañino, es que a mayor cantidad de agua que se beba al día es mejor, y que el consumo de ésta es un factor determinante para bajar de peso.
La nutrióloga explicó que la cantidad adecuada de líquido depende de cada persona, de su peso y talla, de la temporada, si hace calor o frío y de qué otros alimentos se consuman en el día.
Hay alimentos, como frutas y verduras, que ya contienen una cantidad considerable de agua, por lo que
beber agua pura en exceso puede resultar contraproducente, además de que no ayuda a bajar de peso si no se le acompaña de una dieta adecuada y actividad física, señaló.
Incluso, expuso, una sobrehidratación puede reducir los niveles de magnesio en el organismo, lo que afecta al cerebro y puede provocar dolor de cabeza, pérdida de memoria, convulsiones, parálisis cerebral y acelerar el envejecimiento.
Por otra parte, el exceso de micción que se presenta al consumir muchos líquidos, puede provocar pérdidas masivas de potasio; lo que a su vez puede desencadenar arritmia del corazón, falla cardiaca y, en casos
extremos, la muerte por estado de choque. Además, el exceso de agua, por un tiempo sostenido, va dañando poco a poco a los riñones, lo cual puede originar alteraciones graves en su funcionamiento, desatando a su vez todo tipo de trastornos de origen renal.
La cantidad de litros de líquidos recomendable al día, según Barrientos, es de un litro por cada mil calorías, lo que se traduce en aproximadamente 6 a 8 vasos de agua en una dieta balanceada, rica en frutas, verduras y cereales.
Mantener el organismo bien hidratado, pero sin caer en el abuso, finalizó la especialista, es un requerimiento indispensable para mantener una buena salud.