El tenista estadounidense Andre Agassi reconoció haber consumido la droga conocida como ‘cristal' en 1997, cuando todavía estaba en activo, por lo que tuvo que mentir a la ATP, organismo rector del tenis mundial, para evitar alguna sanción por su comportamiento.
En su autobiografía, de la que el periódico The Times publicó un fragmento, el ocho veces campeón de torneos Grand Slam contó que probó la droga debido a que no atravesaba su mejor momento deportivo, al haber caído del top 100 del ranking por una lesión en la muñeca, y por los problemas que tenía con quien sería su esposa, la actriz, Brooke Shields.
Agassi admite que su asistente, a quien sólo identifica como Slim, fue quien lo invitó a probar la metanfetamina, cuyo consumo se sanciona con hasta cinco años de cárcel en EU.
"Slim puso un poco en la mesa, separó un poco y la esnifó. Separó otro poco y yo esnifé un poco", relata, "hay un momento de arrepentimiento, seguido por una tristeza devastadora. Luego viene la euforia que barrió todo pensamiento negativo de mi cabeza. Nunca me había sentido tan vivo, con tantas esperanzas y nunca más sentí tanta energía".
Después de ese incidente, narra, recibió una llamada de un doctor de la ATP, quien le informo que había dado positivo en un control antidoping por drogas recreativas, como lo es el cristal, lo cual le acarrearía una suspensión de tres meses al ser considerada por el organismo rector del tenis como una violación clase 2.
"Mi nombre, mi carrera, todo pendía de un hilo; todo lo que había logrado, todo por lo que había trabajado, todo quedaría reducido a nada", continúa, "días después me senté y le escribí a la ATP una carta llena de mentiras intercalada con algunas verdades".
"Decía que Slim, a quien había despedido, era un adicto a las drogas y que seguido ponía metanfetaminas a sus refrescos (lo cual es verdad), después, en lo que fue la mentira más grave, dije que recientemente había tomado accidentalmente una de sus bebidas. Pedí comprensión y firmé: sinceramente...".
El tenista afirma que se sintió apenado por el hecho, además de que se prometió que sería la última vez que consumiría drogas. La ATP revisó el caso y lo desechó.
La autobiografía de Agassi, narrada en primera persona, saldrá, en algunos fragmentos, en The Times el miércoles y jueves.
Agassi ganó Wimbledon en 1992, el US Open en 1994 y el Abierto de Australia en 1995. Después de los hechos contados protagonizó un gran regreso al circuito al imponerse en Roland Garros en 1999, de nuevo el US Open en 1999 y en tres ocasiones en el Abierto de Australia, en 2000, 2001 y 2003.