Lejos quedaron aquellos tiempos en que centenas de connacionales abarrotaban las casetas de cobro durante las vacaciones navideñas.
En esta temporada el paso de los paisanos solamente llenaron las casetas el sábado, indicaron trabajadores del punto de cobro de Esperanza.
Uno de los paisanos, proveniente de Washington, Estados Unidos, afirmó que si bien la crisis económica impidió a muchos connacionales venir a visitar a sus familias, más bien fue el miedo a las autoridades aduanales lo que los limitó.
“No es posible que atravesé tres estados americanos y nadie me molestó, pero aquí no había caminado ni 50 metros dentro de mi país y ya me estaban esculcando todo”, dijo.
Hay mucho miedo a venir porque los pocos artículos que logran reunir para traerles a sus familias en México, citó, se las quitan en muchas ocasiones.
Hasta en los retenes policíacos les han tratado con mucho respeto, indicó, pues los agentes los orientan adecuadamente sobre los diversos servicios de las ciudades.
En la caseta de Esperanza se encontraron con personas que les dieron información sobre la ciudad, expuso, lo cual es agradable para alguien que viene de tan lejos.
Otros viajeros indicaron también que en la Aduana es donde encuentran el mayor problema para su viaje.
“A nosotros por fortuna no nos han pedido nada los policías y así esperamos seguir hasta llegar a Zacatecas dijeron integrantes de la familia Lara Zazueta.
Ellos vienen desde Los Ángeles y dijeron que muchos mexicanos se quedaron en Estados Unidos por temor a no poder regresar.
Trabajadores de la caseta de cobro indicaron que esta temporada no se vieron largas colas de automóviles como en años anteriores.
Más bien, citaron, han ido pasando muchos connacionales desde agosto pasado.
“Todo el año ha sido así, como que muchos se están regresando por los problemas de empleos que también se dan en Estados Unidos”, expusieron.