Según la lista de Global Philanthropy Group y Barron’s Internacional.

Cuando la situación se pone difícil, los filántropos deben intentar hacer más con menos. Por eso cobra relevancia qué es lo que se hace con la donación.

La lista que aparece más abajo reúne lo mejor de lo mejor en una selección realizada por la publicación Barron’s en colaboración con la consultora global Philanthropy Group. Son los 25 mejores donantes del año, en términos no de cantidad de aporte sino de calidad en los resultados obtenidos.

Global Philanthropy Group y Barron’s estudiaron enormes cantidades de filántropos, calificándolos según criterios tales como innovación, calidad de sus alianzas con otros grupos, los efectos de la donación y la posibilidad de replicar sus proyectos exitosos.

1. Pierre & Pam Omidyar,Omidyar Network
Pierre Omidyar, el fundador de eBay, dice que el mejor consejo filantrópico que recibió fue: “nunca montes una fundación”. La Red Omidyar funciona más bien como una unidad de capital de riesgo que invierte en empresas y ONG que apuntan al cambio social. Sus esfuerzos tienen enormes efectos multiplicadores. Un fondo de US$ 100 millones que la pareja colocó en Tuft University va a producir US$ 1.000 millones en micropréstamos en países en desarrollo y simultáneamente ganancias para Tufts. Desde 2004 ha destinado US$ 300 millones a Wikipedia, “microseguros” y tecnología que mejore la transparencia de los gobiernos.

2. Jeff Skoll, Skoll Foundation
Skoll se asegura de que sus donaciones logren retornos sociales muy superiores al dinero invertido. Desde hace 10 años viene subvencionando– sin restricciones – a 59 grupos de emprendedores que tratan de construir un mundo más próspero y más pacífico. Uno de los beneficiarios entrenó ejércitos de ratas para oler y detectar minas enterradas en África, que abandonadas desde las guerras civiles.

3. Chris y Jamie Cooper-Hohn, The Children’s Investment Fund Foundation
En su carácter de gerente de uno de los fondos de cobertura más grandes de Gran Bretaña, Chris Cooper-Hahn se ganó el apodo de “implacable”. Pero los niños de India y África subsahariana no lo saben. Chris envía una buena parte de las ganancias del fondo a una fundación manejada por su esposa Jamie, con US$ 2.500 millones en activos. La fundación luego usa ese dinero para salvar niños salvando madres.

4. Eli y Edythe Broad,The Broad Foundations
Para que una causa filantrópica sea aprobada por Eli Broad, debe superar una prueba: “¿Es algo que no hace nadie más?”. Ellos hacen cosas muy diversas como capacitar directores para que manejen escuelas más eficientes o financiar investigación médica de graduados jóvenes. El mantra de esta pareja es una frase de Carnegie: “Quien muere con riqueza muere con vergüenza”.

5. Thomas Siebel
El multimillonario tecnológico Siebel financió una masiva campaña contra el uso de la metamfetamina luego de que un amigo en Montana —quien además es sheriff– le mostró los estragos que el psicoestimulante casero estaba haciendo en la población joven rural. Siebel tapizó el estado con carteles y 61.000 cortos de televisión para advertir a los jóvenes. Resultado: Montana, que figuraba en quinto puesto nacional por abuso de la droga, ahora está en el puesto número 39. Otros seis estados han replicado el programa.

6. Donna & Philip Berber
Después de que Philip Berber vendió su firma de comercio online CyberCorp a Charles Schwab por US$ 100 millones en 2000, él y su esposa Donna concentraron su acción filantrópica en un solo país: Etiopía. Hasta ahora han financiado 3.600 pozos de agua, 400 escuelas y 6.500 micropréstamos y su obra a llegado aproximadamente a dos millones de etíopes. Mejor consejo: “No puede uno marearse en el acto de dar y olvidarse de la gente misma”, dice Donna Berber.

7. Fundación Bill y Melinda Gates
Con US$ 34.000 millones en activos y más por venir de Warren Buffett, ésta es, lejos, la fundación más grande del mundo. Su objetivo es ambicioso: busca una vacuna contra el SIDA. Eso puede llevar una década o más para hacerse realidad, pero a Bill Gates no le importa: “Soy optimista, por eso sigo firmando cheques”. Si las iniciativas de largo plazo dan resultados positivos, estarían fijando un nuevo estándar para la filantropía de alto impacto. Tienen proyectos en más de 100 países. Notable éxito en doblegar la malaria infantil. Consejo para los recién llegados a la filantropía: “Lo primero es ayudar en la propia comunidad, luego en los países pobres.”

8. Paul Tudor Jones II, Fundación Robin Hood
Paul Tudor Jones II, gerente de un fondo de cobertura, montó su fundación en 1988 desde donde reúne dinero de sus pares para ayudar a los pobres de Nueva York. Cada centavo va directamente a programas que ayudan a a la gente a salir de la pobreza. El programa se está repitiendo en otras ciudades.

9. Helen y Swanee Hunt, mujeres que mueven millones
Son las dos hijas del magnate petrolero de Texas H. L. Hunt que suman el poder de otras mujeres acaudaladas para ayudar a otras mujeres. Piden a mujeres exitosas de todo el país que les extiendan cheque de por lo menos US$ 1.000 para todo tipo de causas en pro de las carenciadas. Hay juntado US$ 180 millones en sólo 3 años. “Por primera vez en la historia, las organizaciones de mujeres no reciben las sobras”, dice Helen, de 60 años.

10. Richard Branson, Virgin United

Luego de lanzar su propia aerolínea para desafiar a las gigantes, el magnate británico está ocupándose de algunos de los problemas ambientales y sociales más inextricables del mundo. Su Carbon War Room, por ejemplo, premia a los individuos y científicos que les acercan nuevas formas de controlar el calentamiento global. Está ofreciendo US$ 25 millones por un plan que elimine el carbono de la atmósfera.

11. John Wood, libros para los niños
Su misión – poner libros en las manos de la mayor cantidad posible de niños – “comenzó como un hobby, que se transformó en pasión y luego en obsesión”, dice. Este ex ejecutivo de Microsoft pasó de donar libros a escuelas en Nepal a construir y equipar bibliotecas enteras en nueve países, incluidos Zambia y Laos. Sus programas ya han alcanzado a más de 3 millones de niños. Distribuye un libro cada tres minutos.

12. Arpad Busson, ARK: todo para los niños
“Arki Busson, financista con base en Londres, maneja su grupo filántropo como si fuera un fondo de cobertura, prometiendo a los donantes “retornos absolutos”. Con ese fin, tomó la idea de su ex patrón Paul Tudor Jones II y se asegura que los patrocinadores cubran todos los costos, de modo que 100% de las donaciones van a los niños. Exige resultados mensurables y los obtiene. El grupo ha sacado a 1.700 niños en Europa oriental de instituciones de caridad y se aseguró de que 50.000 hijos de pacientes con SIDA en Sudáfrica puedan ir a la escuela.

13. Bill y Hillary Clinton, Fundación William J. Clinton
Clinton amplifica su voz mediante asociaciones; la Clinton Global Intiative desafía a gobiernos, empresas, académicos y otros líderes a crear soluciones innovadoras para viejos problemas. Dio acceso a la escolaridad a 10 millones de niños, agua potable a 12 millones y logró una reducción de las emisiones de dióxido de carbono de 40 millones de toneladas métricas.

14. Jane Rosenthal, Craig Hatkoff y Robert De Niro, Tribeca Film Festival
El trío de productores de cine transformó el horror del 11 de septiembre 2001 en un espíritu de cooperación y reconstrucción del Tribeca en Manhattan. “El mundo no necesitaba otro festival de cine, pero sí Tribeca, para volver a l vida”, dice Rosehnthal. En un notable ejemplo donde el arte genera desarrollo económico, el primer festival, en 2003, generó unos US$ 50 millones para los comerciantes de la zona. El acontecimiento atrae hoy a 2,3 millones de cinéfilos al barrio.

15. Jimmy Carter, The Carter Center
Como lo hizo durante su presidencia, Jimmy Carter lucha por la paz y los derechos humanos en el mundo. Comenzó vigilando elecciones en más de 70 países a través de su Carter Center, fundado en 1982. Usó su prestigio para ayudar a resolver conflictos — como su misión en Norcorea en 1994 – y para dedicarse a los sin techo y enfermedades como malaria y ceguera de río. A sus 85 años, sigue organizando un proyecto de construcción con Habitat para Humanity.

16. Sunil Mittal, Fundación Bharti
Después de convertir su Bharti Group en el interés de telecomunicaciones más grande de la India, Mittal está usando su influencia financiera y conexiones con el gobierno para repartir las ganancias económicas del país entre un sector más amplio de la población. La fundación Bharti se concentra en mejorar la educación, una necesidad urgente: casi 300 millones de niños indios mayores de siete años son analfabetos. Cuando Mittal abre una escuela – más de 200 hasta ahora – también capacita a los maestros y abre bibliotecas en los alrededores. Tiene asociaciones con IBM; Vodafone y Oracle, entre otras.

17. Brad Pitt, Fundación Make It Right
Puede no ser la más grande donación de esta lista, pero el aporte que hace Pitt de US$ 5 millones para 150 nuevos hogares en Nueva Orleans es un ejemplo clásico de filantropía de alto impacto. El proyecto, orientado hacia los barrios más afectados por el huracán Katrina, ya está siendo copiado por otras fundaciones y gobiernos. Las casas tienen diseños innovadores y una tecnología altamente verde (el gasto promedio en electricidad es de US$ 35 por mes). El actor consiguió financiamiento adicional del productor Stephen Bing y del alcalde de Nueva York Michael Bloomberg. Además ha pedido el diseño de una casa que flote para el caso de otra inundación.

18. John Fisher, Fundación KIPP
Donald Fisher, el fundador de las tiendas GAP, sintió que no podía mirar de brazos cruzados cómo descendía el nivel educativo. “Siempre sintió que las oportunidades que él había tenido deberían estar disponibles para todos”, dice su hijo John, quien pasó a ser jefe de las actividades filantrópicas de los Fisher luego de la muerte de Donald en septiembre 2009. Los Fisher inauguraron 82 escuelas gratuitas en 19 estados, casi todas en barrios pobres de grandes ciudades. También dieron dinero inicial para el gigantesco plan Teach for America, que envía graduados universitarios a los distritos escolares más pobres.

19. George Soros,Open Society Institute
Este financista de origen húngaro defiende la democratización sin violencia desde los años 70. Ayudó al nacimiento de la democracia en Georgia, financió becas universitarias para estudiantes negros en Sudáfrica en la era del apartheid y, más recientemente, donó US$ 100 millones para suavizar el impacto de la crisis económica en las regiones más pobres de Europa central y oriental, el foco de su actividad filantrópica. Opera a través de una sólida red de gobiernos, organizaciones y particulares en todo el mundo. El total de sus donaciones hasta ahora, unos US$ 6.000 millones.

20. Howard G. Buffett, Fundación Howard G. Buffett
En 2006 Warren Buffet dio a cada uno de sus tres hijos un adicional de US$ 1.000 millones para que financiaran sus esfuerzos filantrópicos. Howard, el mayor, ayuda desde hace años a los granjeros africanos que debieron abandonar sus lugares de origen, a volver a sus hogares y retomar su trabajo en países como Kenya, Somalía y Darfur. “”Ellos arriesgan su vida”, dice. “Nosotros hacemos lo más fácil”.

21. Earvin “Magic” Johnson, Fundación Magic Johnson
Cuando el gran basquetbolista anunció en 1991 que era HIV positivo, el SIDA era visto como una sentencia de muerte y la gente a quien se lo diagnosticaban no veía alternativa. En los casi 20 años que han pasado desde entonces, Johnson ha hecho lo indecible para cambiar todo eso. Fue vocero no oficial de la gente que vive con HIV /SIDA y, a través de su fundación, proporciona exámenes gratuitos a más de 38.000 norteamericanos en 16 grandes ciudades. Además, se expandió hacia una cantidad de otros esfuerzos. Sus becas vienen con mentores, computadoras e invitaciones a una converencia anual.

22. Marcos de Moraes, Zip Educação/Instituto Rukha
En su trabajo diurno, el empresario brasileño Marcos de Moraes intenta persuadir a la gente más privilegiada de Europa y Estados Unidos – entre 20 y 30 años – a adoptar la cachaca, el licor brasileño derivado de la caña de azúcar. Él es presidente de Sagatiba, la empresa de bebidas espirituosas. Con sus donaciones, está mejorando la vida de los jóvenes en las regiones más pobres de su país. Dos años después de la fundación del Instituto Rukha, para ayudar a mantener a los niños fuera de las calles, 93% de los geneficiados se han inscripto en la escuela. De Moraes es parte de un círculo global de filántropos auspiciados por la organización Synergos.

23. Jennifer and Peter Buffett, Fundación NoVo
Peter Buffet, segundo hijo de Warren Buffett, y su mujer Jennifer, concentran su filantropía en ayudar a mujeres y niñas en naciones en desarrollo. “Si uno las ayuda, termina impactando en muchas otras áreas de la comunidad, porque son las mujeres las que se involucran en todo tipo de actividades, desde ir a buscar agua hasta brindar ayuda sanitaria”, dice Peter. Una de sus iniciativas de microfinanzas canalizó US$ 3 millones en subvenciones a 14.000 muchachas bangladeshi, ayudándolas a iniciar un negocio.

24. William Barron Hilton, Conrad N. Hilton Foundation
El clan de William Barron Hilton es más conocido por vivir en grande que por dar en grande, pero el hotelero espera cambiar esa percepción dando 97% de su riqueza a la fundación Conrad N. Hilton. Eso significa otros US$ 2.000 millones que pasarán a la fundación y que luego serán orientados hacia una enorme cantidad de causas pequeñas pero de alto impacto. Proporciona máquinas de coser a monjas para que manejen una escuela vocacional en Vietnam, ayuda a educar a bebés con discapacidades en todo Estados Unidos y respalda un programa habitacional para los sin techo de Los Angeles.

25. David y Cheryl Duffield, Maddie’s Fund
Cuando David Duffield estaba creando Peoplesoft, prometió a su perrita llamada Maddie que si se hacía rico, haría donaciones para ella y los de su raza. En 1998, dio US$ 200 millones del capital de PeopleSoft para crear la Fundación Maddie, que encuentra hogares para unos 70.000 perros y gatos y lucha contra la eutanasia en las perreras. Ha dado US$ 70 millones a grupos que luchan por el bienestar de los animales, establecimientos veterinarios y otros, convirtiendo a los Duffields en los donantes más generosos por los derechos animales.