MONTERREY, NL.- Jugadores de los Trigueros pasaron el susto de su vida, luego de que el avión en el que viajaban a Nuevo Laredo sufriera una descompostura en el tren de aterrizaje y una de las llantas no bajara, lo que los obligó a aterrizar de emergencia de “panzazo”.
En el avión viajaban también los integrantes del equipo de Soles de Mexicalí y los Toros de Nuevo Laredo, quienes apenas el miércoles jugaron en Mexicali.
Afortunadamente no hubo alguna situación que lamentar y todos los ocupantes resultaron ilesos, salvo una persona con una lesión menor, informó el equipo, gerente deportivo del equipo.
Se señala que el avión donde viajaban los dos equipos que están disputando los cuartos de final de la LNBP estaba a punto de llegar a Nuevo Laredo, cuando el piloto del avión les informó que no podían aterrizar debido a una descompostura en el tren de aterrizaje.
Luego de varios intentos por tratar de que bajara la llanta delantera del avión, no se logró el cometido, por lo que el piloto informó a la tripulación que regresarían a Monterrey para realizar un aterrizaje de emergencia, debido a que la pista de esta ciudad es más amplia.
El piloto tuvo que realizar un aterrizaje de “panzazo”, ya que el tren de aterrizaje nunca bajó.
Al momento de bajar el avión se fue de lado, y debido a lo forzado del aterrizaje hubo una ligera derrama de combustible, pero afortunadamente no pasó a mayores aunado a que el equipo de emergencia del aeropuerto ya estaba listo para cualquier contingencia.
“El capitán nos salvó la vida, la verdad hizo un excelente trabajo, al llegar al aeropuerto de Monterrey ya nos estaban esperando los equipos de emergencia, el capitán siempre nos avisó de lo que estaba ocurriendo”, señalaron los miembros del equipo.
Debido al accidente ninguno de los dos equipos pudieron trasladarse inmediatamente a Nuevo Laredo, ya que ambos se quedaron sin maletas, donde se encontraban sus artículos personales, uniformes y material deportivo.