La demanda de agua para la población de Hermosillo podría ser satisfecha con un mejor manejo de la cuenca del Río Sonora, sostuvieron los consultores en hidrología Octavio del Campo y Enrique Aguilar.
Dicho manejo, explicaron, incluiría la reconversión agrícola de la Costa de Hermosillo para introducir cultivos que demanden menos agua; los ahorros por este concepto serían transferidos al consumo urbano de la capital.
Actualmente la cuenca del Río Sonora está sobreexplotada, dijeron, pero la reconversión agrícola y la reducción de la superficie de siembra en la Costa permitirían obtener mayores ahorros.
Invitados por productores del Valle del Yaqui, los dos consultores se mostraron cautelosos y en ocasiones renuentes en dar alguna conclusión o un juicio sobre el debate que se vive en Sonora por la posible construcción dela acueducto que llevaría agua de la presa de El Novillo a la capital del Estado.
“No se deben polarizar opiniones, hay que tener más cuidado y tener más información para abrir el análisis”, coincidieron.
Y reiteraron:
“No conocernos bien la situación, apenas venimos a estudiarla”.
Consideraron difícil optar por la construcción de una planta desaladora ya que el agua producida tendría un costo muy alto.
Pero también advirtieron que la transferencia de agua de la cuenca del Río Yaqui a Hermosillo podría convertirse en una experiencia difícil pues, argumentaron, “las transferencias intercuencas se están volviendo cada vez más problemáticas”.