Con la llegada de la primavera, la ciudad se llenó se niñas abejas, niñas flores, niños leones, niños cachorros... y de padres orgullosos que pasean a sus hijos sobre el toldo de sus carros.
Son los desfiles infantiles que organiza el sector educativo cada años.
Una bella costumbre que llena de alegría y optimismo en una sociedad que aún puede evitar el derrumbe moral que provocan la violencia, las drogas y la corrupción. |