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Pa´las liebres de Chumanpaco… los coyotes de allá mesmo
Letrerito camionero
Si lo miro como comedia no paro de reír en media hora. Si lo miro como tragedia, deploro las limitaciones de los políticos del terruño. Entonces acepto que la democracia que hay en Cajeme es una entelequia que resquebrajan y rearman en ciclos trianuales.
En mayo del 2009, Dossier Político popularizó a Eleazar Federico Verduzco Valenzuela, “Fredi” para amigos y electores. La campaña de Memo Padrés tomaba potencia y las adhesiones daban lustre al candidato opositor, pero además, ponían en el candelero a los líderes agregados.
El momento cumbre de Verduzco Valenzuela quedó en los anales del periodismo; no exenta de filo, la pluma de Felipe Larios reseñó la reunión multitudinaria, con punzante ironía, dejó el sugestivo acápite que perfilaba los protagonismos a los que Fredi es afecto: “Voten por el Memo, pero sobre todo voten por mí”. Ver artículo en la liga: http://www.dossierpolitico.com/vernoticiasanteriores.php?artid=54260&relacion=dossierpolitico
Fredi voceó en la ocasión su discurso, encendido sin llegar a infartante, desbordándose de nerviosismo transmitió cúmulos de emociones al ánimo de los asistentes.
Intuitivo más que conocedor, Fredi midió perfectamente el “timing político”; con alardeos, apostó en el discurso al todo o nada y convocó a los puebloyaquenses a ponerse a la orden y servicio del blanquiazul…
Como era de esperarse, la ventajosa decisión de Fredi y sus huestes, apenas a tres semanas del acto en Pueblo Yaqui le acarreó el premio: sustituyeron a los candidatos originales y el 28 de mayo acreditaron su elegibilidad para regidor propietario por el PAN.
Erra quien pretenda desmentir que la política es de circunstancias, para muestra de las bondades coyunturales que trajo el 2009 véase el caso de Fredi, así como otros señalados triunfos del blanquiazul en Sonora.
Las referencias previas vienen al caso sólo para ponerle contexto a hechos recientes que involucran la imagen pública de Eleazar Verduzco. Porque andando el tiempo, con el triunfo panista, él hoy es parte esencial de al menos tres de las Comisiones del Ayuntamiento cajemense.
Equis día que los ciudadanos atestábamos las salas de espera del Palacio, a la distancia lo conocí en persona; Fredi atravesó el corrillo con paso displicente, mientras a la saga la fiel escudera no pedía, exigía, fósforos o encendedor para prender el pitillo que Fredi apretaba en los dedos medio e índice en la siniestra.
Nuevamente lo vi en la reunión extraordinaria del Cabildo Municipal, el 27 de diciembre pasado, y atestigüé que se ve envalentonado. Ese día, con tono autoritario intentó fallidamente ejercer el oficio de matacuás.
Sentado a la derecha de Hermilo Valenzuela, con un alarido antidemocrático pretendió darle “descontón” al debate sobre el presupuesto que iniciaran poco antes los regidores priistas. Reculó cuando entendió el paso en falso, y aunque acabaló la sesión en silencio, obediente levantó la mano cada vez que el alcalde lo pidió.
Un día después de la Sesión del Cabildo, al final del 2009 y los dos que van del actual, “Fredi” incrementó extraordinariamente su proyección mediática a la comunidad, porque menudeó su presencia en los medios electrónicos locales con mensajes de buenaventura navideña y del nuevo año.
En horarios triple A de la televisión abierta, y a toda hora en radios obregonenses, aparece el regidor Fredi repitiendo en automático el soliloquio que por momentos parece rebasarlo y olvidarse de las palabras memorizadas…
Los tonos son similares en el “espotaje” de la radio y la televisión, pero es en los spots de radio donde la producción alcanza ribetes de cursilería campirana; que si no fuera por el candor de Fredi intentando imprimirle solemnidad al mensaje, los tonos grotescos moverían a carcajadas.
“¡Ay, qué preocupación me causa ese señor!”, dijo contrariada la contertulia que veía atentamente el mensaje televisado. Y añadió: “No sé en qué momento va a desmayarse. Cada vez que lo veo ya ni me fijo en lo que dice sino que espero el momento en que azote”.
El spot radiado es caricatura de solemnidad: en off la voz impostada del locutor presenta a Fredi Verduzco; súbitamente aparece el fragmento de la canción “Yo soy aquel” que interpreta Raphael –se intuye que sería la pieza musical predilecta–, entre notas musicales atenuadas sobresale la voz afectada de Fredi que ofrece el mensaje de año nuevo y presagia para el 2010 logros y resultados de alcance municipal, a tono con las promesas de campaña.
Quien desconozca que Fredi es regidor, creerá de inmediato que es él, el presidente municipal de Cajeme incentivando en plenas pascuas a los gobernados. Mucha presencia mediática. Muchísima y carísima para el Ayuntamiento, cuanto y más como para sostenerla con sueldo de regidor.
Apenas terminó la campaña; aún se desconoce el informe de los cien días que dará el alcalde y, sigue pendiente el programa municipal para el trienio 2009-2012. El H. Ayuntamiento de Cajeme reclama hoy atención de tiempo completo a todos sus integrantes.
En lugar de verlo en televisión, sería fabuloso encontrar al regidor Eleazar Verduzco despuntando, desde la vocalía que tiene en la Comisión de Salud Pública y mediante enmiendas al Bando de Policía y Gobierno, medidas que regulen los volúmenes de los vendedores ambulantes y de los gaseros que inmisericordes contaminan ruidosamente el ambiente.
Que desde la vocalía en la Comisión de Transporte Público promueva iniciativas que reduzcan la accidentabilidad urbana, o que al menos contengan a los automovilistas que invaden pasos peatonales al hacer alto en las esquinas. O de perdida, mínimas mociones que devuelvan la propiedad de las banquetas a los transeúntes de la ciudad.
Antes que escucharle pronósticos festejando que en el 2010 la administración municipal saldará la totalidad de los compromisos de campaña, sería interesante que el regidor Fredi Verduzco acometiera desde la representación social que ostenta, la formulación, fundamentación y la puesta en marcha del reglamento de protección civil que hace tanta falta a Cajeme.
Es hora que el regidor Fredi deje de promocionarse y que en cambio trabaje con prisa y sin pausas en la representación social que le confirió la sociedad cajemense. Es hora para aprovechar su presencia en la Comisión de Desarrollo Social y empujar los estudios de género que permitan a los cajemenses conocer las situaciones reales de la violencia doméstica para impulsar las acciones públicas que la mitiguen.
No hay tiempo para lucimientos personales, es necesario que Fredi desde Cabildo eche adelante las tareas que le encomendó la ciudadanía y abandone por ahora los sueños calenturientos de las diputaciones. Se espera de él que recoja iniciativas de la ciudadanía y ayude a construir en Cajeme las coordenadas de mejor calidad de vida y mayor nivel de salud.
Aunque Fredi sea infatigable y trabaje con denuedo, sus apariciones mediáticas son intentos extremadamente precoces; o qué es acaso, que a tres meses de la gestión que durará tres años, busque posicionamientos a potenciales candidatura que lo lleven de nuevo al Congreso.
Vuelvo al inicio: tengo sentimientos ambiguos. Hay en las producciones de Fredi tonalidades ambivalentes, así que me quedo con que en el Cajeme del 2010 se reeditan tragicomedias al mero estilo de Esquilo: escenas de llantos junto a carcajadas.
Lo cierto de esos comerciales, es que El Fredi podrá sentirse político fuera de serie, pero la terca realidad lo pinta político fuera de tiempo.
Jesús Noriega
