Entre las distintas ideas que han surgido en el contexto del boicot a Arizona están aquéllas que sugieren no ir a Arizona, no hacer el famoso “shopping” ni dejar un solo dólar allá.
Otras más fuertes sugieren abstenerse de consumir cualquier producto estadounidense, incluyendo adquirir en cualquiera de sus franquicias. Esto ha despertado críticas por considerarse una medida regresiva en tiempos de globalidad que, además, terminaría siendo un “balazo en el pie”, pues terminaría afectando la misma economía nacional y presionando en los escasos empleos disponibles. ¿Será?
Otras ideas han ido desde proveer información y conscientizar al resto de sonorenses para que, por una vez en al vida, seamos solidarios y nos unamos en torno a la idea del boicot. Otras son un poco más radicales, como lo sería clausurar simbólicamente y por unas horas la garita internacional de Nogales (esto el día que entre en vigor la ley).
En fin, ideas hay muchas, desde cerrar las cuentas bancarias en bancos de Arizona (y cambiarlas a otros estados) hasta ‘castigar’ a los empresarios locales que no se sumen.
Como sea, hay una frase muy cierta que permite la diversidad: “Cada quien vive su boicot a su forma”, mientras participe, claro.
Una de las últimas ideas (la de castigar a los empresarios locales no solidarios) incluso motiva el título de mi columna de hoy, pues sería un reto bastante amplio e interesante: “Empresario sonorense, si les compras, yo no te compro”. ¿Se podrá?
Por lo pronto en Facebook el grupo “Boicot Comercial de Sonorenses a Arizona por causa de la SB1070” tiene ya más de 8 mil miembros en apenas unos cuantos días y se ha compartido una primera lista de empresas con sede en Arizona (la cual está disponible también en http://www.Arizona-Boycott.org/)
En Twitter, por su parte hay varios, entre ellos #boicotalracismo o #altoarizona.
¿Seremos los sonorenses lo suficientemente solidarios con los nuestros y con nosotros mismos?
¿Y al Gobierno de Sonora?
Considero que el gobernador Padrés hizo bien en cancelar la sesión de este año de la Comisión Sonora-Arizona. No es posible que exista un doble discurso: Por un lado que tenemos “ciudades hermanas”, una “historia común”, etcétera y, por el otro, aprueban una ley discriminatoria, que promueve el odio y la discriminación en nuestra contra.
Como sea, si no existe respeto no puede haber diálogo que resulte provechoso.
Sin embargo, es importante insistir cuantas veces sea necesario que no podemos ser “candil de la calle, oscuridad de la casa” y condenar la discriminación en Arizona, pero hacer oídos sordos de la que existe aquí en casa.
Por ello el día de ayer un grupo de personas enfermas se concentraron frente a Palacio de Gobierno para exigir que el Isssteson deje de discriminarlas, ya que son rechazadas y condenadas incluso a morir por no tener la atención y los tratamientos a los que tienen derecho.
¿Habrá boicot contra el Gobierno del Estado por discriminar a los enfermos?
La salud de las personas no es un juego, no puede ser negociable ni puede esperar a que se construya un hospital de tercer nivel para no “sacrificar la calidad”… ¿Pero sí pueden sacrificar a las personas?
Si hay un déficit en la institución el artículo 116 de la ley 38 señala que es el Gobierno del Estado y los organismos los responsables de aportarlo. ¿Por qué lo tienen que pagar los enfermos?
En fin, si ahora permitimos que se discriminen a los enfermos en cualquier institución, prácticamente estamos permitiendo que pronto nos discriminen a nosotros mismos, pues nadie tiene la salud comprada.
En La Lupa: Saturados
¡Qué saturados estamos de problemas en nuestro País!
Cada vez más surgen a la luz pública gran cantidad de temas, injusticias, ejecuciones y escándalos que compiten unos con otros en los medios, llegando a mostrar el verdadero caos en el que vivimos inmersos.
¿Hasta cuándo los gobiernos van a dejar de anunciar promesas para concentrarse en anunciar resultados?
Ya no nos interesan los arranques de programas de Gobierno para “x” o “y” asunto… la gente está ávida de resultados concretos y palpables.
Si tan difícil es gobernar, ¿entonces para qué están ahí? (silencio incómodo).
Creo es momento de citar a Alejandro Martí cuando les dijo en su cara: “Si no pueden… ¡renuncien!”.
Hasta pronto.
Guillermo Noriega Esparza
Internacionalista, UNAM y director de Sonora Ciudadana A.C.
Correo: noriega@sonoraciudadana.org.mx