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De los acontecimientos sociales y políticos no podemos disociar el aspecto anímico. Y el quebranto de la huelga en la mina de Cananea no es la excepción.
Las esposas de los mineros han manifestado en declive emocional ante los atropellos de que han sido objeto por parte de la minera México, respaldada por las autoridades federales y ciertos medios de comunicación.
A nombre de muchas familiares de mineros me han hecho llegar vía correo electrónico esta significativa carta que reproduzco en este espacio; y que da cuenta del ánimo de las familias de los mineros. Misma que me fue solicitada hacer llegar al diputado Samuel Moreno:
"Le escribo esta líneas con el corazón en la mano y una tristeza muy grande también por todos los acontecimientos y violaciones que hemos sido objeto, me dirijo a usted especialmente porque usted ha sido la única persona que ha mencionado y le ha dado importancia al aspecto emocional de los Cananenses, y más en estos días tan terribles donde una vez más hemos tenido que aguantar frustradamente la incursión violenta, prepotente y anticonstitucional de las fuerzas armadas.
"Lejos de acabar con el problema este se hace cada vez más grande, emociones y tensiones acumuladas por meses, años, están a flor de piel, si el gobierno no tiene la voluntad de negociar una solución y sigue privilegiando y protegiendo a GM, estarán sepultando a los mineros en su tristeza, en su frustración e impotencia, han dado toda su vida a la mina y en esta lucha si les arrebatan su trabajo y contrato les arrebataran la vida. Y créame que no exagero.
"Si no se busca y encuentra una solución mediática Cananea jamás se recuperara de este golpe, aun con la mina trabajando y con empleados nuevos, prevalecerá en el pueblo la división, el coraje y la sed de justicia (y tampoco exagero).
"Por todo esto le pido que no permita que la lucha de los mineros termine así, usted como Cananense verdadero y no los que acaban de vender la historia y las raíces del pueblo que los vio nacer, le pido que no claudique y haga todo lo que está en sus manos para que no sepulten a Cananea y sus mineros.
"Estamos decididos a llegar hasta las últimas consecuencias, si nos quitan todo ¿qué podemos perder? Pero necesitamos de su ayuda para poder salir adelante y airosos de esta lucha.
Atn. Ana Rosa Ortiz."
