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Después de un debate ético en el que se ve envuelto el detective Brian O’conner, vuelve a las pantallas en la segunda entrega de la saga Rápido y Furioso, mismo escenario distintos protagonistas. Al igual que vuelve el protagonista principal de esta columna, el Mtro. Gonzalo Rodríguez Villanueva y los personajes que lo acompañaron a lo largo de su gestión al frente del Instituto Tecnológico de Sonora.
Es inevitable inmiscuirse en un sin número de escenarios antes de emitir un juicio sobre la gestión que realizó el rector en su periodo. Si bien es cierto no se pretende abordar todos estos factores, interesa comentar sobre uno en particular, los colaboradores del rector, ya que muchas de las críticas realizadas hasta este momento sobre las decisiones no solo tienen influencia directa de la rectoría, si no de distintos departamentos muy cercano a ella.
En anteriores oportunidades expresé una opinión que con el paso de los meses se ha ido ratificando, a mi entender una de las mayores complicaciones de la gestión del Mtro. Gonzalo Rodríguez fue la elección de sus colaboradores más cercanos, si bien es cierto no se puede decir que en su totalidad, considero que sí en su gran mayoría.
En los distintos escenarios institucionales y dentro de las actividades académicas fueron quedando de manifiesto los intereses que tenían cada uno de los miembros del equipo más cercano al Rector, los cuales estaban más allá de sus funciones administrativas. Partiendo de lo plasmado en la Ley Orgánica de la institución, el Rector tiene la facultad de designar a los vicerrectores, los cuales deben de ser ratificado por el Consejo Directivo, es por ello que no se puede eximir de responsabilidades al Mtro. Gonzalo Rodríguez ya que el personal administrativo fue elegido por él para desempeñar un cargo dentro de su gestión. Lo que conlleva a tener una responsabilidad compartida con el mal desempeño y/o los malos manejos dentro de las funciones del equipo de trabajo que haya elegido, esto se hace extensivo para los distintos puestos claves de las diferentes áreas académicas, administrativas y cualquier otra área de la institución.
¿Por qué mencionar esto? Por la simple razón que la mayor parte de las criticas de está gestión han sido solo para el Rector de la institución, olvidando que dentro de las mayores responsabilidades que le han atribuido a esta gestión, también existieron otros protagonistas que formaron parte de manera activa en todas las actividades realizadas, llámese como se llame la iniciativa estratégica que se quiera analizar.
Dentro de estos protagonistas se puede observar que varios de ellos estaban buscando su beneficio personal, hablando estrictamente en lo institucional, lo cual quedó en evidencia al escuchar los posibles candidatos que se presentarán en las próximas elecciones para Rector de nuestra institución, algunos que llevan mucho tiempo haciendo una campaña interna para conseguir el apoyo del personal de las distintas áreas del ITSON. ¿Está bien? ¿Está mal? ¿Es ético? No lo sé, son muchas interrogantes que cada uno de los ciudadanos podrá contestar, pero ello implicó que cada uno de los funcionarios tomaran caminos distintos que no tenían relación con el fin común que se podría esperar de un grupo administrativo que tiene que ir en el mismo camino en mejora de la institución.
También es necesario mencionar que no todo el personal cercano a la Rectoría entra en lo antes plasmado, es de conocimiento de muchas personas que algunos funcionarios estaban en búsqueda del bienestar de la institución, si bien es cierto no se puede generalizar, la realidad es que hay pocas personas envueltas en estás funciones que tienen una preocupación real por mejorar las condiciones institucionales.
No se puede tapar el sol con un dedo, ni se puede minimizar con tanta facilidad las cosas que se hicieron bien durante esta gestión, como lo plasmaron en una encuesta sobre los aciertos y errores de esta administración, existió una mejoría en la infraestructura y la proyección institucional entre muchos otros aciertos. Pero también se tiene que mencionar todas las problemáticas en las que se vio envuelta la administración: entrega de plazas académicas de manera ilícita, las finanzas, las problemáticas de los estudios de doctorado falsos. Para emitir un juicio sobre esta administración se deberán de tomar en cuenta muchos factores, no solo lo que se observa a simple vista, hay que profundizar sobre todos los responsables de las problemáticas de la institución, no se puede responsabilizar a un solo protagonista.
A mi entender esta fue una gestión que tuvo muchos alti-bajos, creo que es apresurado clasificar en buena o mala, pero sí se puede decir que existieron muchas irregularidades que se pudieron evitar.
