Angélica Beltrán / Política en Movimiento
La negociación para elegir al candidato del PRI al gobierno de Sonora fue compleja desde el inicio hasta su conclusión la noche de este lunes; no tanto por los aspirantes en sí mismos, sino por los grupos de poder detrás de cada cual.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, estuvo detrás de Toño Astiazarán; el coordinador de los senadores, Emilio Gamboa, detrás de El Borrego Gándara y Manlio Fabio Beltrones, detrás de la dupla Jesús Cano Vélez y Claudia Pavlovich. Todos estos líderes priistas que se enfrentaron sin remedio en la contienda interna.
Se sabe que en las reuniones a puerta cerrada el ambiente fue ríspido y se tornó complicada la designación; sin duda la “candidatura de unidad” costó mucho al PRI nacional y de Sonora.
Aunque sin duda la mejor elección para asegurar la indispensable unidad en el PRI fue la senadora Claudia Pavlovich; en torno a quien se sumarían con gusto Cano Vélez, quien se unió a los aspirantes más para respaldar a la candidata de Beltrones que para pelear la candidatura.
Toño Astiazarán había adelantado que se uniría contento al candidato elegido; pero Ernesto Gándara se resistió hasta el último momento en eso de unir fuerzas. Y no es de extrañar la postura, si recordamos que en su momento no se alineó a la candidatura de Alfonso Elías Serrano al gobierno estatal.
Así al resultar electa Claudia Pavlovich como la candidata del PRI al gobierno de Sonora, quedó de manifiesto que la negociación la ganó Beltrones. Tanto porque jugó bien sus cartas, como porque le resultó una ventaja que el Borrego Gándara hubiera cosechado más enemistadas que amistades en su camino, por lo que estaba más que visto que nunca lograría la unidad en torno a él.
¿Claudia Pavlovich el candidato más débil en la contienda electoral?
Según palabras del diputado Jorge Villalobos, coordinador de las campañas electorales del albiazul en el norte del país, el PRI haría un gran favor al PAN si elegía a Claudia Pavlovich como su candidato al gobierno de Sonora, pues representaba en la lista de los cuatro aspirantes el rival más débil para la contienda electoral.
Ante lo cual, creo que se equivoca Villalobos al menos por dos cuestiones de relevancia: Pavlovich podría garantizar en realidad la unión de los priistas en torno a la meta de ganar las elecciones en Sonora; pues como lo declara el presidente nacional, César Camacho: unido el PRI no hay quien le gane. Y se aprecia que los priistas en Sonora cerraran filas en torno a Claudia.
En segundo lugar, el PRI lleva la ventaja de que el PAN ha hecho un mal gobierno en Sonora; que no erradicó las prácticas de corrupción que criticó, sino que por el contrario ha demostrado ser insuperablemente más corrupto que sus antecesores.
El hermetismo y desdén por la prensa
El hermetismo reinó de inicio a fin en la designación. Los aspirantes evitaron cualquier contacto con la prensa, de ahí que durante su ir y venir a las reuniones con el presidente César Camacho e Ivonne Ortega, secretaria general, en las instalaciones del CEN del PRI, éstos evitaron todo el tiempo las entradas principales. Y es entendible, ya que cualquier declaración en falso podría haber roto las negociaciones.
Lo curioso es que incluso luego de ser elegida Claudia Pavlovich la candidata de unidad para el gobierno de Sonora, el hermetismo continúo. Y luego de la foto oficial, salieron la candidata y los contendientes, sin ser vistos, directo al elevador que los condujo a sus respectivos automóviles.
Evitaron el encuentro con los únicos dos reporteros que permanecieron en la sala de prensa en espera de esta noticia; a cambio, le pasaron la tarjeta respectiva al conductor de Noticieros Televisa, Joaquín López Dóriga, quien dio a conocer el nombre de la candidata del PRI al gobierno de Sonora, antes de que los negociadores se tomaran incluso la foto oficial.
Agencia Noticias México
