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De pronto aparecieron cientos de casas habitación destruidas por los vándalos, luego algunas personas cuando salieron para dirigirse a sus trabajos se dieron cuenta que sus automóviles no estaban donde los habían dejado en la noche anterior, las patrullas anduvieron con su torretas encendidas toda la noche por los cuatro puntos cardinales de la ciudad, unos a toda velocidad y en forma desenfrenada corrían de sur a norte y otras la hacían en sentido contrario, lo hospitales dieron la voz de alarma dado que sus bancos de sangre se habían quedado sin reserva, en algún punto de La ciudad un hombre se desangraba a consecuencia de heridas de bala a la horilla de una banqueta y los hombres que tripulaban las patrullas hacia todos los puntos cardinales de la ciudad pasaban de largo por el lugar de los sucesos hasta que en algún lugar se encontraban y se decían unos a otros”_ te toca a ti llegar primero_ y los otros le contestaban de la misma manera, _ no al que te toca es a ti_ y así hasta que en suerte acordaban quien sería el primero en llegar, con la consiga que en el próximo suceso serian los demás en la llegada primero del lugar de los hechos, los asaltos a mano armada y machete en ristre se daban en todo lo largo de la noche, hombres , mujeres , jóvenes y viejos deambulan toda la noche como seres mentecatos sin rumbo fijo buscando una porción de droga.
Pero lo bueno, a pesar de todo, te la digo de una vez:
En este pueblo no hay ladrones.
La gente habida de noticias abre los periódicos para ver los últimos sucesos, enciende sus computadoras y busca en los portales las noticias de último momento y no. Efectivamente en este pueblo no hay ladrones, ni asaltantes, ni narcotraficantes, ni sicarios, ni asesinos, ni tan Siquiera sospechosos que hayan cometido algún delito y que hayan tomado rumbo desconocido.
Quizá suceda lo ocurrido en el mundo de Juan Rulfo, que alguien le este tirando a un pobre negro llegado y estando en el lugar y hora equivocada y lo acusen de la intranquilidad del pueblo.
El hombre de raza negra personaje central del cuento de Juan Rulfo, se llama Dámaso, hoy en día parafraseando a esos sucesos rulfianos el personaje se llamara “ENE”, O PUEDE llamarse también “Damaso N” EN El realismo mágico TODO SUCEDE, basta un decreto, así que a lo mejor no hay ladrón porque no hay botín, puede suceder también que no haya narcotraficante porque no hay droga, o puede darse el caso que no haya crimen porque no hay arma ni difunto, no obstante en las funerarias se velen cuerpos de personas asesinadas en forma continuas y en las iglesias no bien se acaba de terminar un novenario cuando ya esta encima otro, no obstante que los vecinos coloquen lonas previniendo a los ladrones que serán castigados por ellos mismo, no obstante que las agencias de seguro se escandalizan por el incremento de sus siniestros, y que constantemente en los hospitales se dé la voz de alarma que las reservas de sangre hace mucho se terminaron.
Las perspectivas cambian, es presunción que estas siempre sean para bien Se sabe que el estado como primicia tiene siempre el bien común, dejemos pues en la esperanza de que los cambios propuestos por el mismo estado contribuyan a este objetivo.
La visión subjetiva que se tiene de esto así lo indica.
La seguridad y la justicia bien pueden lograrse.
Nota:
Algunas cosas que aquí se mencionan pueden ser imaginarias y otros no, la verdad no sé cuáles son unas y cuáles son otras.
