Lo que la llamada (entre Trump y Peña) revela compromete, seriamente, al jefe de Estado mexicano. Su tibia o nula reacción a la barbaridad que expresa Donald Trump, respecto al tipo de ayuda que ofrece para enfrentar al narcotráfico, es alarmante. Trump no mide sus palabras. Parece regañar a Peña Nieto cuando dice: “…ellos tienen que ser eliminados y usted no ha hecho un buen trabajo para golpearlos hacia fuera”.
Trump invita a Peña a trabajar juntos para “eliminar eso” -refiriéndose a los criminales- y no muestra ningún empacho al decirle de qué se trata: “… éste es un grupo difícil de gente y tal vez su Ejército les tiene miedo, pero nuestro Ejército no les tiene miedo y nosotros les ayudaremos con ese 100 por ciento, porque está fuera de control…totalmente fuera de control”. Peña no lo interrumpe, ni sale en defensa de su Ejército al que tildaron de miedoso, ni hace el menor intento por frenar las intenciones de Trump de intervenir en México. Peor aún, solo asiente cuando Trump -sin rodeo alguno- le suelta una propuesta ilegal, inconstitucional e inadmisible que debió haber sido rechazada de inmediato:
“Enrique, tú y yo tenemos que eliminarlo -refiriéndose al crimen organizado- tú y yo tenemos que golpear el infierno fuera de ellos. Escucha, sé lo difícil que son estos ‘chicos’. Nuestros militares los matarán como nunca pensaron. Trabajaremos para ayudarlos a eliminarlos… Sus ciudadanos están siendo asesinados en todo el lugar, sus policías reciben un disparo en la cabeza y sus hijos están siendo asesinados. Y los eliminaremos”.
Peña Nieto, en lugar de poner un freno a semejante despropósito, no solo asintió, sino que, de alguna manera, reforzó la idea y, de paso, soltó algunas frases que bien pudo haber leído de alguna tarjeta.
“Estoy totalmente de acuerdo”, dijo Peña. ¿No es una aceptación tácita a lo que le acababa de plantear Trump con esa frase brutal e inequívoca, la más grave de toda la conversación?: “Nuestros militares los matarán como nunca pensaron…los eliminaremos”, refiriéndose a gente que está en México y que, en todo caso, debería ser detenida para ser procesada…
¿No es ésta una conducta que -si nos vamos al código y nos ponemos estrictos- calificaría para ser considerada como traición a la patria?