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En política no siempre las formas son fondo
Somos lo que hacemos cada día. De modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito. Aristóteles.
La frase de “En política, la forma es fondo”, es de la autoría del político mexicano de origen español, Jesús Reyes Heroles (1921-1985). Esta frase puede encerrar varios significados, ya que algunos toman por hecho de algo, según las actitudes, los gestos o las palabras, sobre todo en los actos donde se mueven los políticos; se puede uno equivocar.
Antes quizás, esta frase escondía algo de verdad, porque todos estaban arropados por el poder hegemónico del antiguo PRI; por cierto hoy “modernizado”, en su mimetismo, en MoReNa o sea en el movimiento del Lopezobradorismo. Aunque muchos seguidores de esta corriente política, que aglutina, licuadas las “ideologías” de los diferentes ex militantes de otros partidos; aunque ellos tienen “otros datos”.
Tampoco, a veces, esta frase no funcionaba tal cual. Se sabe de antaño, en la época del Priismo, algunos políticos actuaban como si ellos iban a ser los candidatos, señalados por el dedo teocrático, de ser el tapado y algunos no guardaban las formas o la angustiante espera de la decisión del Tlatoani (Presidente en turno) y se les caía su aspiración, pero se alineaban. No les quedaba de otra. El arrastradismo arrastra. Hasta la fecha.
También, por supuesto, que se intentó esta designación en el año 2006, cuando Fox, tenía de favorito a Santiago Creel, pero que ante una contienda interna del PAN quedó Felipe Calderón y ganó la candidatura, “como dicen en mi pueblo” (así es el inicio de la famosa frase de Calderón) agregando “haiga sido, como haiga sido” … es “verdat” (diría AMLO y además ¿lo pensaría? Agregaría: “es-purio” caón Calderón, haiga sido, como haiga sido me chingó la presidencia).
Como dijo algún escritor extranjero que no recuerdo su nombre: “es irracional votar contra el propio Interés”, a esta frase Noam Chomsky (filósofo y politólogo, norteamericano de origen judío), afirma que “sobre los intereses comunes de la élite, que es capaz de pensar por nosotros, porque nosotros somos incapaces de hacerlo …”
Lo anterior, es como preámbulo. Con respecto al chisme grillero que se desató ante el discurso, que como anfitrión pronunció el Gobernador de Chihuahua Javier Corral Jurado, en la visita al Estado del Presidente Andrés Manuel López, guardando – creo- las formas Institucionales ante la figura presidencial, señalando las diferencias y coincidencia, con una diplomacia (interna), que siempre ha caracterizado al gobernador; esto hizo que las suspicacias se expresaran por doquier como si fuera un Tsunami político. Sobre todo, al interior del Partido Acción Nacional, de los que siempre han estado en contra de Javier Corral, por los intereses de la élite que gobierna el Partido desde el 2013 hasta la fecha y que ahora pretende, esa élite, la reelección del actual presidente del CD Nacional, diga lo que se diga, es gente del Anayismo que persiste en todos los Comités Directivo Estatales del País; que ni tarde ni perezosos empezaron a grillar de nuevo a Corral, como siempre lo han estado haciendo. Grilla que subió de intensidad ante la oposición de Javier Corral a la candidatura de la Sra. Maru Campos (que ganó la gubernatura), que supuestamente (con pruebas dicen) está coludida en la nómina secreta del ex gobernador César Duarte (tema ampliamente tratado en otros artículos).
Por tan “controversial” discurso, los titulares de algunos periódicos nacionales, refiere como “Un Secreto a Voces” que Javier Corral saltaría hacia MoReNa, aunque primero se especuló que brincaría a otro partido gandalla del transfuguismo; el MC. No dudo que MC, MoReNa y otros partidos se estén frotando las manos para que voltee hacía ellos, coqueteándole con piropos del “arrabal político”.
Mal haría Javier Corral echar por la borda su credibilidad ante una gran mayoría de ciudadanía que lo ha catalogado como uno de los políticos más congruentes y honestos del País. Tiraría por la borda no solo su capital político que a través de más de cuarenta años que ha militado en el PAN a forjado, sino también su férrea convicción política; que, por una horda elitista dentro del Partido, siempre lo ha tratado de bloquear en sus aspiraciones. Estos se pondrían contentos de que renunciara al partido y quitarse otras de las espinas que les molesta, en donde la columna vertebral hace remolino (¡Ah, no les digo, su nombre coloquial!). Su renuncia – si se va a MoReNa- engrosaría ese transfuguismo PRIANPRDISTA, que se mimetizó para conformar el movimiento Lópezobradorista.
No duden que después de que sea Ex gobernador, a Corral le van a buscar de que acusarlo, hasta por debajo de las piedras, principalmente la que será gobernadora a partir de septiembre, de ese Estado tan bonito; donde en un municipio de la sierra hice mi Servicio Social, hace 45 años; que bonito es Chihuahua.
Cierto es que la oposición real, se ha querido aglutinar, pero el chapulineo intenso, hipócrita y mal agradecido en sus huestes ha ido en aumento, desde el 2015, 2018, 2021, además de las famosas concertaciones que a lo descarado se han
hecho, en este gobierno con ellos. Gente que se quedó o no en el PRI, PAN, han sido seducidos por el canto de sirenas del poder, o para lograr alguna concesión, para evitar una demanda por actos de corrupción o salir libres de eso, e irse para algún consulado (dicen). También fue un secreto a voces, como operaron gentes desde adentro del PRI, y de otros partidos, en las elecciones del pasado 6 de junio del 2021. Hundiendo más el barco opositor.
Tal vez no se ganó una batalla, pero la lucha debe continuar. Quizás algo no le funciona a la oposición para que verdaderamente encuentre la forma y el fondo de sus acciones. Dice un dicho que: “La nave saldrá airosa si toda la tripulación hace su tarea”. Así de simple, pero está cañón.
Quien soy yo para decirle a Javier Corral Jurado: que la piense bien y no queme sus naves antes de tiempo. Una gran multitud creé en él. No nos defraude.
No “leaunque” diga Séneca: La política apesta. Colabore, como siempre lo ha hecho
