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La afluencia de libros donados a la Biblioteca Cultura Sonorense disminuyó en estos días. No dudo que se reactivará.
Entre noviembre y diciembre envié una explicación del proyecto y una solicitud de donación al Instituto Sonorense de Cultura, la Universidad de Sonora, el Instituto Municipal de Cultura y Artes y El Colegio de Sonora. Solamente he recibido un lote de libros del ISC, La directora general del IMCA me los prometió y estoy seguro de que cumplirá.
De la Universidad y del Colegio no he recibido de respuesta ni una sílaba. No tienen la obligación de donar nada a nadie, ¿pero qué cuesta contestar con dos líneas sin importar que la contestación sea negativa? Los buenos modales no hacen daño a nadie.
El Colson anuncia para mediados de marzo una “feria del Libro”. Aparté Mil Pesos de mi pensión mensual para comprar lo que me alcance con esa cantidad y mantendré ese “moche” (auto moche) no sé cuántos meses más.
Otro que no tuvo la atención de contestar es el diputado Jacobo Mendoza, a quien le dejé la solicitud en la Oficialía de Partes del Congreso cuando todavía era el presidente. En su caso le señalé los libros que la Biblioteca en proceso de desarrollo necesita: las Memorias que cada Legislatura ha publicado en los últimos seis o siete periodos (por cierto que he participado con la revisión final de los textos de varias de ellas).
Pero no puedo decir que el diputado Mendoza incurrió en una descortesía ya que se condujo como lo que es: un diputado. El diputado tiene la obligación de oír al ciudadano y de prometerle soluciones, pero no está obligado a cumplir las promesas. Me parece justo aclararlo.
CONVENIO CULTURAL
La noticia más importante para los medios, en fecha reciente, es la firma del convenio de la Universidad de Sonora y el Instituto Sonorense de Cultura, representados por dos mujeres expertas en Humanidades, la rectora Rita Plancarte Martínez y la directora general Guadalupe Beatriz Aldaco. Ambas sustentan un nuevo, democrático concepto de la cultura. Estaremos pendientes de los resultados para comentarlos.
En cuanto a la máxima Casa de Estudios parece claro que no habrá Simposio de Historia y Antropología este año, pues si lo hubiera ya estarían en eso. La costumbre ha sido realizarlo en febrero.
Pero, aunque en corto número, no han faltado las exposiciones (en la sala de la Plaza Bicentenario), y la presentación de libros en Nogales, San Luis Río Colorado, Hermosillo y hasta en Ciudad Obregón, con clima de violencia y todo. Ya iremos desglosando los comentarios respectivos.
carlosomoncada@gmail.com
