¿Médicos cubanos, y derechohabientes al IMSS guatemaltecos? ¿Mercancía de exportación hacia México?
“El poder no cambia a las personas, sólo revela quiénes verdaderamente son”.
José Mujica. Ex presidente de Uruguay (Montevideo- 20 de mayo 1935).
México a través de los años posteriores a la revolución mexicana, ha tenido una tradición humanitaria al brindar asilo político a cierta población de otros países, que por cuestiones políticas, guerras o por desastres puedan correr un riesgo de seguir radicando en ellos. Disposiciones que están plasmadas en la: LEY SOBRE REFUGIADOS, PROTECCIÓN COMPLEMENTARIA Y ASILO POLITICO. Última reforma publicada DOF 30-10-2014 (articulados en 20 páginas por si alguien desea consultarla).
Dos hechos históricos en relación al asilo político, vienen a mi memoria: el asilo político que el gobierno de México (Gral. Lázaro Cárdenas de Rio), otorgó en 1938 a los exiliados políticos, durante la guerra civil española (julio 1936- abril 1939), conocidos como la “Generación del 38”. Que por cierto muchos de estos refugiados vinieron a contribuir tanto en el aspecto cultural, como económico en México. En lo cultural, fueron los fundadores del Colegio de México. Que por cierto tuve la oportunidad de asistir en dos o tres ocasiones a escuchar conferencias y varias veces a comprar libros editados por el mismo, durante dos años de estancia en la Cd. de Mex.
El otro hecho histórico, del cual fui testigo, en parte del mismo: en 1973-1993 cuando se concedió asilo político a un grupo importantes de chilenos. Gobernaba en esa época Luís Echeverría (1970-1976) después del golpe de Estado al gobierno socialista del Dr. Salvador Allende, al ser derrocado por el General Augusto Pinochet (golpe de estado, conocido como el “Pinochetazo”), instalando la dictadura cívico-militar, que duró de 1973 a 1990. En esa época, estaba estudiando Medicina en la Universidad Autónoma de Puebla (UAP, hoy Benemérita 1970-1975, me titulé en 1977). Me tocó escuchar la bienvenida en el Paraninfo de la Rectoría que se les daba a ciertos personajes que fueron contratados por la Universidad como profesores, entre ellos varios Médicos (por cierto con estos exiliados vino un reconocido médico originario de Sinaloa: Dr. Rafael Valdez Aguilar, prestigiado médico internista, que trabajó en Chile), en ese acto estuvo el Canciller chileno Orlando Letelier. No me tocó recibir clases con ellos. Algunos compañeros y amigos que si recibieron clases, decían que daban medio tiempo de la cátedra asignada y medio tiempo de adoctrinamiento marxista-leninista. Incluso revisé algún texto de anatomía (si mal no recuerdo) donde “veladamente, entre líneas” se mencionaba algunas frases o consignas ideológicas. En 1977 la UAP, le confirió el grado de Doctor Honoris Causa, al secretario general del Partido Comunista chileno, Luís Corvalán. (Hasta aquí este breve preámbulo como antecedentes de este escrito).
En el contexto legal, a reserva de lo que digan los jurisconsultos, el tema de los 25,000 guatemaltecos que se incorporaran al IMSS-Bienestar (ahora), como promesa de ayuda del Presidente de México, hecha el fin de semana en ese País, encajaría “Como Protección Complementaria”. Si entran legalmente al país como trabajadores, automáticamente deberán cotizar como cualquier empleado mexicano. O ¿todo se pagará con cargo al erario público? ¿Entrarán en el INSABI, donde no tiene cobertura para gastos catastróficos (¿o sí?), para tratamiento de cáncer, tanto infantil, como en adultos entre otras patología?
El IMSS tradicionalmente se sostiene de una manera tripartita, con participación de patrones, trabajadores y gobierno federal. Las cuotas obreros patronales aportan el porcentaje más alto de los recursos (19.29 % total,correspondiendo un 16,73% a los patrones y 2,56% a los trabajadores), el gobierno solo aporta el 5.3 %. El IMSS tiene otros ingresos por la afiliación voluntaria u cuotas extraordinarias (ejemplos los costos del Seguro de Salud para la Familia, entre otros). (Datos proporcionados por el Lic. Raúl Alemán). A menos que tengan otros datos.
Respecto al convenio de contratación de médicos, con el gobierno de Cuba (gobierno antidemocrático, heredado por los Castro (Fidel se lo hereda a su hermano Raúl, y este a Díaz Canel), médicos con privilegios que no tienen muchos de los médicos mexicanos, desempleados y empleados. En México existen más de 50 mil médicos, entre especialistas y médicos generales que están sin empleo o tienen sueldos precarios. Ejemplo de sueldos “raquíticos” el de los médicos que trabajan por contrato cada 6 meses (un poco antes para no generar antigüedad y algunas prestaciones) en los hospitales de la Secretaria de Salud, tienen sueldos menores que los médicos de base, estos ganan el doble o triple que los contratados, y además, sin las prestaciones de aquellos.
(Problema que no sucede con los médicos o personal de salud del IMSS, son más justos los sueldos).
Y no se digan del bajo sueldo (beca) de los jóvenes médicos que hacen su Servicio Social en una abrupta y peligrosa serranía, gana más un NiNiNin (jóvenes que Ni estudian, Ni trabajan, Ni lo intentan, mantenidos por el gobierno actual).
Muchos médicos titulados con su cédula profesional, trabajan arduamente en las famosas farmacias con consultorio anexo; que para ganar un sueldo igual a los del IMSS, tienen que trabajar arduamente o en dos o tres partes (suplentes en dos instituciones y en una farmacia de similares; no les queda de otra).
Durante la pandemia en el 2020 el gobierno “contrató” a 585 “médicos cubanos”, no sé si acreditados como tales, “para ayudar” en la misma, con sueldos altísimos; pago entregado al gobierno de Cuba ¿el gobierno o la Secretaria de Salud, informó del desempeño de estos médicos cubanos? ¿Estaban realmente capacitados? Ahora, ¿Serán necesarios traer al País a estos 500 médicos, con sueldos que rebasarán los 120 mil pesos mensuales cada uno?
Los médicos mexicanos que fueron contratados para atender paciente COVID cuando más álgida estaba la pandemia, fueron despedidos y no les cumplieron la promesa DEL PRESIDENTE de darles plazas dentro del sector salud. Actualmente la mayoría están sin trabajo. Creo que con menor sueldo, del que pagaran al gobierno de Cuba, muchos ni la pensarían, y se irían a trabajar. ¡El hambre es cabrona y más el que la aguanta!
La visita del Sr. Presidente mexicano, a varios países centroamericanos repartiendo dadivas en:
Guatemala, El Salvador, Belice y Honduras y después a Cuba, la Isla Caribeña, el Presidente trato de hacer sentir de que México es “el hermano mayor” de estos países centroamericanos, o tal vez emulando a Luís Echeverría, con su populismo quiere ser como Lázaro Cárdenas cuando otorgó asilo a los españoles de la generación del 38.
Echeverría, asiló a los chilenos en 1973 con una excelente solidaridad, desde antes y después del derrocamiento del Presidente Allende con quien tenía una gran amistad, concediendo muchos apoyos a Chile (donación de petróleo y un intercambio cultural, entre otros más), durante sus primeros años de su frustrado gobierno (por el cruel golpe de Estado). Echeverría tuvo el sueño guajiro de ser el líder, el adalid de los pueblos latinoamericanos.
AMLO sueña con los sueños de Echeverría o quizá, se un burdo remedo del gran José Mujica, pero en lugar de tener un “vochito” (Volkswagen) como Mujica; AMLO ha mejorado, primero un surito y ahora con varias camionetitas blindadas (y no está mal, es el Presidente y se debe cuidar). Pero andar haciendo caravana ajena, con dispendio del erario público (también otros presidentes lo hacían), que debería utilizar en mejorar las condiciones de los trabajadores de la salud en México, que hay muchos, tal vez igual o mejor preparados que los cubanos, que solo esperan una oportunidad laboral.
AMLO, deseaba estar en Cuba y esperar su reconocimiento, tal vez con la vehemencia que tuvo el galardonado Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez – guardando la proporción- de tener amistad (que la tuvo), con Fidel Castro. Pero cuando le preguntaron GABO ¿si viajaba tanto a la Habana, por qué no se establecía allí? Él contestó: “Sería muy difícil para mí llegar ahora y adaptarme a las condiciones. Extrañaría
demasiadas cosas. No podría vivir con la falta de información” García Márquez no fue el primer escritor latinoamericano que puso su prestigio y su pluma al servicio de un dictador. Rubén Dario, Pablo Neruda, entre otros lo hicieron.
¡Pero que necedad señor Presidente! O ¿Cuál es su pretensión, qué trama? ¿Le mortifica las elecciones del 2024? Quizás para entonces ni usted ni yo, estaremos en este mundo.
“Dios guarde la hora para otro cabrón”. Y no para Usted.
raulhcampag@hotamil.com
@RaulHectorCampa1