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“.. hay doctrinas y oradores, dictadores sin piedad que gobiernan sin verdad. Y hay mentiras en los diarios, en las redes y en el bar. Hay extraños que por años ocultaron la verdad hiriendo de dolor”. Canción "Mi verdad", interpretada por Maná y Shakira.
En cada época electorera o pre electorales, escuchamos resaltar las doctrinas o los principios que rigen a los partidos políticos, con que hacen gala en la soflama incendiaria clientelar de nuestros encumbrados políticos “pro hombres” (con perdón de los apologistas del lenguaje inclusivo, rectifico: pro seres humanos); retórica que en los hechos resulta por lo general fallida, en prometer lo que no podrán cumplir.
Entre las principales acciones gubernamentales, entre otras no menos importante, están: 1.- la paz social y no la tan cacaraqueada “pax narca, en sana convivencia con la ciudadanía”, a través de un pacto no escrito con un grupo o grupos de la delincuencia organizada, a cambio de tener paz en las ciudades del país, paz que no ha resultado con otras y actuales estrategias de gobiernos, de los abrazos y no balazos o dejar actuar (o imponer a estas organizaciones), a cada una ciertos territorios; tratando de disminuir la violencia desatada entre ellos por la disputa de ciertos sectores de los Estados o del país con los efectos colaterales como consecuencia, donde muere gente inocente, lamentablemente jóvenes; porque las políticas gubernamentales no han generado las oportunidades de trabajo, para que no sean reclutados por grupos delincuenciales. Tal parece que los gobiernos le apuestan a una “simbiosis” del crimen organizado, con el resto de la sociedad.
2.- La Salud Bio-Psico-Social, es también de trascendental importancia para la población, que debe estar garantizada por los gobiernos en turnos. Cierto es que se ha logrado a través del tiempo, construir Instituciones de Salud en el País, que, si no son perfectas debido a malas administraciones directivas de alto nivel, son perfectibles, que no se corrigen destruyéndolas. Lo que habría que hacer, es NO solapar la corrupción en cualquiera de las instituciones gubernamentales, combatir los contubernios de corrupciones con algunos sindicatos; actos de corrupción en donde algunas autoridades se hacen de la vista gorda, tolerando estas acciones. Un solo ejemplo: a nivel de la Secretaría de Salud existen un número importantes de aviadores, que por años han cobrado sin trabajar, solapados por el sindicato, dándoles funciones de comisiones (“legales”) ficticias, pero no solo en esta Instituciones. Esto también ocurre por ejemplo en PEMEX, con los huachicoleros de cuello blanco al interior de la misma Institución, la venta de plazas o “renta de la mismas” por trabajadores de base, que “alquilan” sus puestos por determinado tiempo a gente necesitada de trabajar. Acción permitida por el sindicato y sus líderes; esto se conoce desde hace tiempo. “Son valores entendidos”.
“La corrupción es una cultura” (Enrique Peña Nieto).
Por cierto, uno de estos eternos líderes que se mueve en las alturas del influyentísimo transexenal es el multimillonario Carlos Romero Deschamps, entre otros liderzuelos de altos vuelos; por lo se piensa que existe un pacto con los gobiernos en turno y no se duda que con el actual gobierno también existe (Pacto AMLO- Romero, lo mismo que el Pacto Peña-AMLO. A menos de que tengan otros datos). Fuente: Luís Miguel González. Director editorial del economista. Romero Deschamps, sigue siendo libre, millonario e influyente. El economista. 17 de marzo 2021).
En salud, afortunadamente tenemos Instituciones de gran prestigio Internacional, como son los Institutos Nacionales de Salud que se manejan administrativamente, con un porcentaje de subsidio de la S.S., patronatos y de cuotas de recuperación; unas dependen de la S.S. y otras de cuotas obrero-patronales: Instituto Nacional de Cancerología; Cardiología (INC); Pediatría (HIM y INPER INP); Nutrición y Ciencias Médica (INNyCM); IMSS Siglo XXI, UMAES IMSS, La Raza, ISSSTE (Hospital 20 de Nov), etc.
3.- La educación en México. Se dice y está documentado que un pueblo bien educado, con una amplia cultura, es MENOS corrupto, cuando la educación es de calidad y llega a toda la población. Desgraciadamente nuestro País adolece de esa cacareada calidad, y lo vemos en la estadística del INEGI, aunque ha disminuido, todavía existen casi 5 millones de personas de 15 años en adelante que no saben leer, ni escribir. Siendo los Estados con mayores porcentajes: Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Guerrero y Estado de México. Los años promedio de escolaridad es de 9.7 grados (años), con secundaria de terminada. Se dice que existe un alto porcentaje de analfabetos funcionales; “que son aquellas personas, principalmente adultos que, habiendo recibido instrucciones para leer, no lo hacen por una falta de uso” – no tienen el hábito de la lectura (Rodríguez, Gallardo-Adolfo. La lectura en México, una aproximación cuantitativa. Rev. Este País. No.188. Mex.2006).
Aunque existe una clasificación con grado mayor de escolaridad e incluso universitaria, que son los alfabetos disfuncionales, que han recibido educación superior pero que no tienen la aptitud de leer o salen con una educación mediocre en comparación de otros países en iguales circunstancias socio económicas y culturales, ejemplo, Chile. Años atrás, el promedio de lectura de los mexicanos, era 0.5 libros al año. Actualmente hemos progresado de 1 a 2 libros por año, cuando en algunos países europeos como España y Francia, se leen en promedio de 30 a 40 libros anuales.
Lo más triste es que los políticos de nuestro País, pocos tienen el hábito de la lectura o de la buena lectura. Pero eso sí, cuando andan en campaña prometen un mejor sistema de salud (“como en Dinamarca”), una mejor educación y accesos a la universidad para todos, sin previa evaluación, cuando se sabe que tenemos en algunas carreras universitarias un alto porcentaje de deserciones (en algunas facultades llega hasta el 40% de desertores) a pesar del requisito de pasar un examen de admisión de rigor. Estamos de acuerdo en otorgar becas a los mejores estudiantes que no tengan los medios para continuar sus estudios universitarios, con un estricto seguimiento. “La educación cuesta mucho, pero cuesta más la ignorancia”.
Los políticos en sus “jolgorios trinos” y de los canticos de sus adeptos “jilguerillos de lúcidos colores”, cuando se acercan los procesos electorales, aseguran que ahora sí, se acabará la corrupción a todos los niveles de gobierno (menos la de los burros de mis compadres-exclamaran frenéticos-, “porque somos un gobierno que ha combatido a fondo la corrupción”), no más sobornos burocráticos, se combatirán a las organizaciones delictivas, no cobro de pisos, secuestros, extorsiones, ni las despiadadas masacres. Se investigarán a fondo las angustiantes y crueles desapariciones, no más madres, esposas e hijos buscando a sus familiares. “El gobierno cumplirá ahora si -dirán con énfasis electorero-, con el deber de irse a fondo en las pesquisas, en busca de la verdad histórica”. Ante estas olvidadas doctrinas de los partidos y de las retoricas fallidas de políticos soflameros …
El pueblo sabio murmurará ¡si pues! Mientras evocará la canción: Desapariciones.
“… Busca en el agua y en los matorrales / (¿Y por qué es que se desaparecen?) / Porque no todos somos iguales/ (¿Y cuándo vuelve el desaparecido?) / Cada vez que los trae el pensamiento/ (¿Cómo se le habla al desaparecido?) /Con la emoción apretando por dentro” Rubén Blades (cantautor, músico, actor, abogado, político y activista panameño. 16 de julio de 1948).
La ciudadanía, en voz de la escritora Británica Virginia Woolf, (de los monólogos de su obra Las Olas) expresará afligida: “… permitirme deseos imposibles de abrazar al mundo entero con los brazos de la comprensión, que es imposible para quienes actúan.” … los que actúan mal (agregaría).
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