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Los alcaldes de los municipios importantes han soñado siempre en dejar a sus gobernadores una obra emblemática de contundente utilidad, no importa su costo, para que se les recuerde y, naturalmente, para que le abra el camino hacia otras posiciones políticas.
El presidente municipal de Cajeme, René Gándara Romo (1955-1958) quedó en la historia como el gran pavimentador de Ciudad Obregón. Javier Gándara soñó en construir en Hermosillo un Metro que trajera a los vecinos de lejanas colonias al centro con rapidez; el Maloro Acosta intentó convertir a Hermosillo en la ciudad mejor iluminada del Noroeste.
En estos tiempos en que los fondos escasean (¿y en qué tiempos no han escaseado?), el presidente municipal de nuestra ciudad reflexiona en que puede responder el poder público al ciudadano con la atención de problemas que requieren obra mediana o pequeña, como una arboleda por allá, una dosis de alumbrado público por allá, reposición de señales de tránsito y cosas por el estilo. Se hizo lo que se pudo, podría declarar al cabo del periodo. Hay comunicadores que han aplaudido esa postura.
Una decisión bien vista, por ejemplo, es que el propio Ayuntamiento le preste a Agua de Hermosillo 140 millones de pesos, pagaderos a un año con intereses razonables, para que resuelva sobre la marcha anomalías cotidianas. Reponer toda la tubería para evitar fugas onerosas y adoptar medidas severas para que todo el mundo pague con oportunidad su consumo, sin consideración para influyentes, son cuestiones complejas que puedan esperar.
Considero que la gente, sin dejar de agradecer las obras pequeñas o medianas, no renuncia a su exigencia de que el gobierno HAGA TODO LO QUE LA LEY LE EXIGE QUE HAGA. La gente cree que un día podrá llegar un alcalde que pueda echarse a cuestas e pesado paquete, pero completo..
EL PRD SE QUEDA, ¡NO FALTABA MÁS!
Si el PRI, cuya respiración hace rato suena como silbido de agonizante, se agarra con fuerza a las prerrogativas partidistas, y prepara candidatos para participar en las elecciones, ¿por qué ha de ser menos el Partido de la Revolución Democrática?
Su líder Fidel Velázquez…, ¡no, perdón!, su líder Jesús Zambrano, declara que el PRD continuará funcionando y que pronto dará a conocer una sorpresa.
Si continúa funcionando será ya una real sorpresa, no sé qué se puede agregar para que los interesados en la política reciban una sorpresa adicional. Es cierto que los políticos, aunque hablen el mismo lenguaje que los ciudadanos, lo interpretan de modo distinto. Con toda seguridad que creen que el PRD está funcionando si les sirve para conseguir una o dos diputaciones plurinominales.
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