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Derecho de Réplica
“En política, las presidencias se ganan por las emociones y … otros artificios. Con Xóchitl, pueden conjuntarse las emociones y razones, para lograrlo”.
La historia de vida de Xóchitl Gálvez, actual Senadora de la República, es un ejemplo de que las aspiraciones del ser humano, sea mujer o hombre, con perseverancia y temple se pueden lograr. Xóchitl, a pesar de las adversidades que padeció desde temprana edad (historia repetidamente contada, para ejemplo a los jóvenes que aspiren a ser mejores), ha logrado sus objetivos: de ser buena profesionista, hija, madre, esposa, empresaria de mucho éxito y política. Nada ha sido fácil para ella. Nunca ha negado su origen humilde, ella si se formó con la cultura del verdadero esfuerzo (no un “esfuerzo de lengua” de la retórica de ciertos políticos). Nació en Tepatepec, un pueblito del Estado de Hidalgo, en la zona del Mezquital.
Profesionalmente, se formó como Ingeniera en Computación en la UNAM, con adiestramiento en Robótica, Inteligencia Artificial, edificios inteligentes, sustentabilidad ambiental y ahorro de energías, con recursos renovables (energías limpias). En su incursión en política, nunca buscó un puesto; a ella la han buscado los políticos, por sus méritos logrados a pulso. No ha buscado el “hueso político, que por adherencia al mismo”, muchos políticos se hacen de mulas Pedro (algunos, de “piojos, se vuelven fifís”, que se “ingren con el hueso” y se hacen, soberbiamente engreídos). A Xóchitl, según ha declarado, no le pueden achacar tal deshonestidad y reta a que le comprueben actos de corrupción
Ella, que circunstancialmente su carrera política la ha realizado en el PAN desde el 2000, simpatiza con ciertas ideas de la izquierda (no de la retórica rancia de “la actual izquierda licuada”); coincide con algunos principios del PAN y disiente en otros, pero que se pueden conjugar lo poco o bueno que le pueda servir a México para el progreso de la Nación. De las ideas de izquierda, quizá se le quedaron por los “rescoldos” de su origen humilde, de su diario batallar en su formación a su paso pertinaz por la Universidad; etapa idealista que muchos hemos pasado como universitarios de clase media baja o media (jodida o jodida y media), que valoramos (la mayoría) el esfuerzo de nuestros padres o el esfuerzo propio (otros), pero sin perder el sentido de la solidaridad y subsidiaridad con los que menos tienen. Así es mi percepción, que tengo de Xóchitl. Su franqueza y su lenguaje pueblerino, coloquial y con tinte pastoril; por su amor a los pueblos originales, sin olvidar sus raíces y su eterna lucha para ser una buena persona; esto avala, entre otras cualidades, su credibilidad. Habrá personas que no les guste su manera de expresarse, pero como dice ella, no se anda con “chingaderas”, al llamar, dentro de la “política a la mexicana” a cada cosa por su nombre. “Al corrupto, corrupto y a los huevones, huevones”.
Respecto a los últimos asuntos políticos-electoreros del próximo 2024, dónde Xóchitl se ha visto involucrada en forma continua en los medios informativos y redes sociales, por lo siguiente: su participación frecuente en la tribuna del Senado y su presencia en los medios; porque ella aspira o aspiraba a ser candidata al gobierno de la Ciudad de México; Otro asunto que ha servido para posicionarla en la palestra política nacional, fue la difamación que externó en una mañanera el presidente AMLO, “sobre la pretensión de Xóchitl de desaparecer los programas sociales”, por lo que ella, y a sugerencia del presidente (¿Qué le pasaría al presidente o cual será su propósito?) lo demandó ante un juez para que se le otorgara su derecho de réplica; derecho qué por cierto el presidente, sí les concedió a Ricardo Rocha (QDEP) y a Julio “Astillero” Hernández, al “tacharlos” como periodistas chayoteros ¿Pero cómo, si el primero los apoyó, aunque después se le salió del huacal, sería por eso? y el otro“El Astillero”, es un reconocido adulador de la 4T ¿pos que le pasó Presidente, por eso aceptó la réplica?
Al negarle el presidente el Derecho de Réplica, concedido por un juez a la Senadora Gálvez, el mismo presidente, y al cerrarle la puerta de “su palacio”, contribuyó para que los reflectores de los medios se enfoquen hacía Xóchitl, aumentando su popularidad en un gran sector de la ciudadanía, que la han impulsado a cambiar el rumbo de sus aspiraciones y se lanza como precandidata a la presidencia de México, analizando sus posibilidades.
El difamador se convirtió en su promotor. A menos que tenga otros datos, con sus “mismos batos de candidatos”, casi todos desertores del PRI. Olvidaba que los candidatos ahora “no son candidatos ni están en campaña”; los de MoReNa son “aspirantes a coordinador nacional de los comités de la defensa de la 4T”.
Con ese eufemismo “de coordinador” no se oye tan mal “ni es violatorio de la ley electoral, si se placean como como candidatos”. También el “Frente Amplio por México” conformado por los partidos de oposición y agrupaciones civiles, tratando de no caer en el “juego de los eufemismos políticos que “enmascaran” la violación a la ley, se agrupan en este FRENTE, término contemplado legalmente, se placearan para lograr “ser representantes del Frente Amplio por México. Ambos, corcholatas del presidente y los opositores, están en el ring de la contienda electoral, con un réferi aparentemente omiso. A esta lucha de rudos contra técnicos, se enfrentarán las y los pretensos. Cierto que hay peligro en las dos coaliciones o alianzas, de que los padroneros y algunos “dueños” de los partidos quieran imponer las antidemocráticas designaciones. Me refiero al mismo presidente AMLO y a los presidentes de todos los partidos, de los grupos confrontados. Los gastos serán tremendos y las consecuencias peore.Como buena gallinita y a pesar de esos riesgos, #Xóchitl Va, pondrá, quizás, todos sus huevos (que no tienen otros) en la canasta, para hacer un omelette que nutra de buenas ideas, sean de derecha, izquierda o de la misma ciudadanía, mezclándolas para hacer una argamasa política fuerte y construir un mejor futuro para México. Si no quedara como candidata, quien surja deberá ser un personaje conciliador de la ciudadanía, porque cada vez está más polarizada; quien gane la presidencia, deberá formar un gobierno de coalición con las mejores mujeres y hombres con verdaderos méritos y honestidad cabal y no de dientes para afuera y no otorgar puestos por cotos de poder o compromisos previos con el o los candidatos, como suele pasar. Este gobierno no ha sido la excepción, de esos compromisos, aunque digan que tienen otros datos.
La ciudadanía debemos de salir a votar, por quien, tras un reflexivo escrutinio, quien lograra una mejor patria, para todos. “Que no nos gane el voto de la emoción, pero si el voto de la razón”.
raulhcampag@hotmail.com
@RaulHéctor Camp1
