El panorama electoral de Hermosillo, hasta hoy medio desmayado, se anima con la precandidatura de María Dolores del Río, a quien difícilmente le podrá siquiera igualar alguien, ya no digamos superar, su experiencia política. Ya fue presidenta municipal, diputada local, senadora y Secretaria de Seguridad del Estado, cargo al que acaba de renunciar luego de haberlo desempeñado con eficacia.
Del Río llegó al mundillo político con la ola panista que trajo también al doctor Juillerat, Francisco Búrquez y otros, y en 2009 se la consideró aceptable candidata para gobernadora si bien el escogido fue, desafortunadamente, Guillermo Padrés.
Creo que será postulada por MORENA con beneplácito y que dejará atrás a Antonio Astiazarán, a quien por cierto la alianza PAN-PRI-PRD no ha confirmado como su gallo. Por mí no hay apuro; hace varias semanas afirmé en este espacio que no votaré por los repetidores.
DEJEN DESCANSAR A DONALDO
Me parece absurdo que intenten revivir el caso Luis Donaldo Colosio. Se abusó con exceso de las especulaciones, la más ridícula, que el Aburto que está por salir de la cárcel no fue el asesino porque se prestó para sustituir en las narices de funcionarios y periodistas, al verdadero homicida.
¿Cómo hubo tantos que repitieran esa historia, el caso extrañísimo de un hombre que tira por la borda treinta años de su vida para que un asesino goce de libertad? El hecho de que en estas tres décadas no se haya atentado contra Aburto es un claro indicio de que no hubo complot en Lomas Taurinas.
Colosio hijo informó a la prensa que ha pedido al presidente AMLO que indulte a Aburto y se cierre este negro y triste episodio que a todos nos ha llenado de vergüenza. No es necesario el indulto porque Aburto cumplió la sentencia que se le impuso y no queda sino satisfacer los requisitos formales para abrirle las rejas de la prisión.
Colosio chico lamenta que usen con fines políticos el atentado contra su padre. Pero ¿no es también político Colosio chico?
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