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Saludo con gratitud y alegría el libro de Andrés González Prieto de muy largo nombre: “La historia de la música moderna en el Valle del Yaqui. Let’s swing. Las orquestas” Con alegría y gratitud porque actualiza mis recuerdos de juventud, sobre todo los que estuvieron enmarcados en el Club Olímpico Cajeme, a dos cuadras del Diario del Yaqui, mi centro de trabajo.
Era el reino de la Orquesta Olímpico, cuya imagen viene acompañada de los grandes músicos y excelentes amigos Luis Montoya, Edgardo “Patotas” Apodaca (en la batería) Ramón del mismo apellido, Toño Limón, guitarrista de excepción (de aquí salió el conjunto de Toño y Luis), muchos más.
No es la primera vez que me entrego a evocar a estos artistas. Hace unos 15 años anduvo por aquí Celso Aguilar, y tocó (clarinete, sax) y charló una noche en el jardín interior del edificio principal de la Unison, invitado por el rector Pedro Ortega Romero, también obregonense. Celso aparece en varias páginas de este libro.
A Gilberto Borrego Zamudio más bien lo recuerdo como político, pues hablé con él muchas veces con fines periodísticos. Y anda por ahí el maravilloso pianista David Peñúñuri que a los periodistas del Diario nos obsequió más de una velada de hermosas melodías.
El texto me muestra aspectos para mí novedosos para los que requiero una segunda lectura. Me enternece la alusión a músicos que no sabían leer los cuadernos pautados pero salían adelante gracias a su intuición y sensibilidad. Y aquellos músicos que además de tocar en una orquesta se daban tiempo para desempeñar otro trabajo. A unos pasos de mi familia, por la Veracruz, vivía don Lolo Nieves, zapatero remendón durante el día que salía al anochecer para integrarse a una banda de “música de viento”
El alma del Club Olímpico era Manuel Islas, generoso con los reporteros; no nos cobraban cuota de admisión a los bailes, lo que nos permitió ver y escuchar a las orquestas de Luis Alcaraz, Evangelina Elizondo, Valladares y otros grandes, así como admirar a Christianne Martell y Ana Bertha Lepe, bellezas mundiales.
Me parece que faltó decir algo de Ramiro Ibarra, gerente del Campestre, que fue también músico. Pero habrá muchas gratas sorpresas, sin duda, en el Tomo II que ya viene y que tratará de Rock and Roll y Los Conjuntos. ¡Bravo, Andrés!
LISTA LA EXPOSICIÓN SUBASTA
Se siguen recibiendo cuadros para la exposición y subasta encaminada a completar el costo de la estatua del maestro Leo Sandoval. Tendrá lugar en la
Biblioteca Rafael V. Meneses ubicada en Garmendia y Tabasco el día 15, a las 19 horas.
Buen número de estas pinturas han sido donadas por artistas sonorenses aunque por otros conductos se han recibido también cuadros de artistas extranjeros. Vaya a la exposición con billetes porque con toda seguridad querrá ser dueño de alguna o algunas de estas obras de arte.
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