• Banner
  • Banner
Jueves 24 de Abr de 2025
El tiempo - Tutiempo.net

La Dictadura Perfecta. ¿Premonición o una realidad?

Raúl Héctor Campa García
Martes 15 de Abril de 2025
 

“Después de la injusticia, lo que más detesto es el dogmatismo”. In memoriam a Mario Vargas Llosa. Escritor peruano. (Arequipa, 28 de mar, 1936-Lima, Perú, 13 abril 2025).

 

Hace un mes, hurgando mi pequeña biblioteca, me encontré con la novela: La casa verde, del escritor peruano Mario Vargas Llosa. Empecé a releerla; pero me ausenté de la ciudad por tres semanas, retornando el día de ayer, y hoy por la mañana. Hacía años la había leído, la que fue su segunda novela del laureado y prolífico autor (escrita en 1966), al igual que su primera novela: La ciudad y los perros (1962), La Fiesta del Chivo, y últimamente: Le dedico mi silencio (2023). Por sus diversas obras literarias novelas, cuentos, relatos y ensayos; obtuvo distintos e importantes premios. 

En el 2010 recibió el premio Nobel de Literatura. Antes de enterarme de su fallecimiento, al estar concentrado en el libro, hice una pausa y me vino a la memoria los escritores casi contemporáneos de este gran literato (de los cuales he leído algunas de sus obras): Octavio Paz, Julio Cortázar, Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez y el mismo Vargas Llosa; y pensé: que sólo Mario, estaba vivo. En eso suena, con tono de mensaje, mi celular (con “X” mensaje) y revisando noticias, como a las 6:pm, me entero del lamentable suceso, la muerte de Vargas Llosa a los 89 años. QDEP, estos cinco gigantes de la literatura latinoamericana. Seguirán vivos por sus obras.

“Vargas Llosa en el principio de su vida como escritor, como muchos, sufrió de carencias económicas y dificultades para que le editaran sus primeras obras. Vivió más de 10 años en París y otros tanto en España; él quería regresar a Perú, pero no como periodista, ni trabajar para los medios de comunicación masiva; se negaba a la idea de servir a los intereses de una empresa minoritaria. No es que fuera un militante político, pero sí, se inclinaba (en esa época), decididamente al marxismo. Mario Vargas Llosa, no fue partidario de la perorata (de los políticos): “Después de la injusticia, -decía- lo que más detesto es el dogmatismo”. (Lo entre paréntesis, lo agrega el autor de esta columna). (Texto tomado de la presentación o prólogo de la novela La casa verde. Por los editores. Las grandes obras del siglo veinte. Mex. 1979)

Un poco antes de 1990, le entró el “gusanito” de la política a este gran escritor (como a muchos intelectuales, “que hubiesen contentado a Aristóteles, cuando decía que los filósofos o intelectuales deberían de gobernar…”. Qué sueños guajiros, del filósofo griego”). Ese año Mario Vargas Llosa compitió para la presidencia de Perú, contra Alberto Fujimori, este último ganó la contienda.  En esos momentos, al perder Vargas Llosa la presidencia, no se quien dijo la frase, que no recuerdo literalmente, en referencia al escritor: “No se ganó la presidencia de Perú, pero el mundo ganó un gran escritor”. Después de esa derrota electoral, se retiró de la política activa. En su libro “Pez en el agua”, relató su experiencia política, declarando que “no se sentía político por vocación”, sino que había sido empujado por las circunstancias. Nunca más participó en política. Pero sus opiniones sobre temas políticos fueron importantes y siempre publicadas por los medios de difusión, tanto culturales como políticos.

La frase más famosa (creo), en referencia a la política, y de los políticos, es la que acuñó Vargas Llosa en un encuentro de escritores convocado por Octavio Paz, en la Ciudad de México: “México es la dictadura perfecta”, refiriéndose al poder hegemónico del PRI, por los años que ha gobernado a México, en una seudo democracia que ha permitido la dictadura de un solo partido en el poder y en ocasiones de un solo hombre atrás del poder (“Eso ya no está pasando en México” – ¿pasaba?-, a menos que ese partido este mimetizado en YSQ), ¿será”?. Y no solo en México, ya que en esa ocasión  y después, criticaba a los gobiernos de Cuba, Venezuela, Nicaragua.  Por cierto, en ese encuentro se molestó Octavio Paz, contradiciendo a Mario Vargas, contestando: “[…] No se puede hablar de dictadura, Mario Vargas Llosa habló de dictaduras militares, así comenzó su intervención. En México, es un hecho, no ha habido dictaduras militares, pero sí hemos padecido la dominación hegemónica de un partido”. (Hasta aquí la cita).

Tener la hegemonía del poder por largos años, pregunto ¿Si no es dictadura, entonces qué es? Por supuesto que los beneficiarios de estos regímenes, como otros, los que gobiernan y sus allegados se hacen ricos y el pueblo, con todo y dadivas no salen de la pobreza.

Sin dudarlo, los grandes escritores de todo el mundo, dónde los latinoamericanos nunca se han quedado a la zaga, todos le han dejado a la humanidad un maravilloso legado en sus obras, un enorme acervo de cuestiones filosóficas en todas las ramas de la ciencia. La política no ha estado exenta de estos legados, porque la política también tiene “su literatura”.

Bien afirmaba Mario Vargas Llosa: “no se puede escribir sino en función de una experiencia personal”. Se dice que no sentía simpatía por la burguesía, quizás a la burguesía política, que todo político tarde o temprano cae o busca serlo. Respecto a esto, el escritor dijo: “una clase absolutamente lamentable, infectada de prejuicios, inculta e hipócrita”. Y agregaba: “La literatura es una trasposición de la realidad”.

DESCANSE EN PAZ, Mario Vargas Llosa.

 

raulhcampag@hotmail.com 

XRaulHectorCamp1 

Política de Privacidad    Copyright © 2006-2025 InfoCajeme.com. Todos los Derechos Reservados.