Seguí algunas de las entrevistas y pronunciamientos que el Papa Francisco hizo durante su pontificado. Retengo algo de lo que dijo en su viaje a México (2016), al destacar a las figuras históricas que conformaron nuestra nacionalidad. Refirió que "México está sentado sobre espaldas de gigantes"; lo hizo en un tono muy elocuente, implicando los riesgos de la desmemoria histórica.
También guardo las imágenes del mensaje pascual Uribit et Orbi, de este domingo (su último mensaje) con el que abrazó todos los dolores de la guerra en las distintas latitudes del mundo y reconoció que el mal no ha desaparecido de la historia, que el mal seguirá existiendo pero sin ejercer poder y dominio sobre quienes se resguardan en la sombra de la esperanza.
En una de sus últimas entrevistas, le preguntaron si le temía a la muerte. Me sorprendió su respuesta, dijo con mucha naturalidad que no y luego agregó que lo que sí pedía "es la oportunidad de verla venir", como sugiriendo que no deseaba una muerte súbita.
Parecería que se le concedió el deseo de "verla venir" y cruzar ese umbral en el calendario de la Pascua. Morir en el momento de la resurrección, en el momento en que el amor venció al odio, la luz a las tinieblas y la verdad a la mentira.
Denotó la disposición de ponerse en el lugar del otro y siempre pidió que rezaran por él.
Qué descanse en paz el Papa Francisco.