Suman 600 ejecuciones este año
Jornada
Jueves 12 de Abril de 2007
Este año se han cometido en México unas 600 ejecuciones ligadas al crimen organizado. Aunque en Michoacán ha disminuido 55 por ciento este tipo de homicidios, en estados como Nuevo León y Tamaulipas los casos se han incrementado 15 con relación a 2006, reconoció Patricio Patiño Arias, subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial dela Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP).
Esta es la primera vez que un funcionario del gobierno federal menciona la cifra de ejecuciones, y también que asegura que entre el armamento que se ha decomisado como parte del combate al crimen organizado hay granadas de alta penetración, de fragmentación, de defensa antiaérea y rifles de asalto como los llamados P-90, que pueden traspasar hasta 50 capas de kevlar (material que se utiliza para los chalecos antibalas).
Patiño Arias puntualizó que "el número de ejecuciones no tiene que ver con los índices mediante los cuales se mide la seguridad pública, porque el robo, en todas sus modalidades, es el delito que más se comete".
Pidió a los legisladores que si quieren coadyuvar a que mejoren las condiciones de seguridad pública en el país "el Senado pudiera establecer una agenda bilateral con el gobierno de Estados Unidos para que se pueda regular con toda precisión la venta de armas en la frontera", donde según informó, existen unas 50 armerías que venden sus productos sin ningún control.
El Estado "hace su tarea"
De acuerdo con el subsecretario, este año se han cometido menos asesinatos ligados al crimen organizado que los cocurridos durante 2006. "Los operativos conjuntos han tenido eficacia y, en algunos casos, ha habido un abatimiento importante de las ejecuciones, aunque, lamentablemente, en otros los indicadores se han mantenido", añadió.
Ante el cuestionamiento de que existe la percepción de una violencia generalizada en el país, y que la situación está fuera de control, Patiño Arias aseguró que se debe diferenciar lo que es la seguridad pública, de la "concepción subjetiva, que tiene que ver con las ejecuciones", ya que en materia de la seguridad pública real "es un orden en el que el Estado mexicano está haciendo su tarea".
A su juicio, "la ciudadanía y la sociedad pueden estar tranquilas porque lo que hay es un efecto de una alta exposición mediática (relacionada con las ejecuciones) que se tiene que combatir también".
Para el subsecretario, la "seguridad pública subjetiva la conforma el miedo, el terror de ver un cuerpo mutilado, una cabeza rodando en instalaciones de seguridad pública, (el video de) un decapitado subido a Internet, que pretende en el fondo generar zozobra, inestabilidad social".