Con diferencia de unas tres horas, dos personas ejecutadas fueron encontrados en el canal Bajo envueltas en plástico negro.
El primero de los fallecidos, bajo evidentes signos de tortura, fue Rolando López Sáinz y el segundo, también encontrado en el canal que corre paralelo a la calle 1,200 del Valle del Yaqui, es César Salas. La Procuraduría de Justicia indaga cómo fueron asesinados.
El primer cuerpo fue visto flotar como a las 9:30 horas por Pedro Hernández Salas, del Distrito de Riego, y avisó a la Policía.
Se presume que tenía unos tres días dentro del canal Bajo, en el kilómetro 62 más 600, por la calle 1,200 del Valle del Yaqui.
Al estar envuelto en un plástico negro, no se apreciaron huellas de heridas de bala pero sí se presume que había sido torturado antes de darle muerte y echarlo al canal.
El cuerpo es de una persona con altura superior a los 1.90 metros y en principio se hablaba del jefe de custodios del Cereso, que se encuentra desaparecido, pero no se confirmó la versión.
Tres horas más tarde fue encontrado el cuerpo de César Salas a unos metros del primero, prácticamente en las mismas condiciones.