Quien siempre recordará el negocio de tatuajes Purplak, ubicado en el edificio Teresa, en Chihuahua y No Reelección, será Ricardo Ortega Parra, de 26 años.
En ese lugar, se peleó con Edgardo García Meyer, de 29 años, quien le causó tres heridas de entre los 3 y los 5 centímetros y hematomas en la pierna y el tobillo derecho, así como golpes en diferentes partes del cuerpo.
Bien tatuadas le quedarán las lesiones causadas con un cuchillo que fue recogido por los policías por fuera del edificio, mientras que al atacante, totalmente ebrio, lo detuvieron en Chihuahua y Guerrero.