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La realidad ha desmentido, una vez más, esa frase célebre que dice: "Entre mujeres podemos despedazarnos, pero jamás nos haremos daño".
La encargada de demostrar lo contrario fue Lucía Álvarez, de 40 años de edad, quien trabaja de mesera en el bar La Bohemia ubicado en calle Chihuahua entre Galeana y Zaragoza.
¿Cómo lo hizo? Pues simple y sencillamente le dio un botellazo en la cabeza a Marcela Gámez, de 36 años, quien departía alegremente con unos amigos en el citado bar sin saber lo que le esperaba.
Todo fue por celos de Lucía quien veía con coraje que los tipos nomás tenían ojos para Marcelita y ésta se regodeaba en su belleza, moviendo las caderas al caminar y mirando despectivamente a Lucía.
Fue entonces cuando ésta ya no pudo soportar la humillación y se avalanzó sobre la bella humanidad de Marcelita y ¡rájale!, le asestó un botellazo en la cabeza causándole una herida que sangró abundantemente.
Cuando fue detenida por los agentes, Lucía aún gritaba frenética advirtiendo que a ella nadie le quitaría el título de "Reina de La Bohemia".
