Ayotzinapa

“Los hechos de violencia ocurridos en Iguala, Guerrero, hace casi siete semanas duelen y avergüenzan a la nación entera. Es imperativo que se muevan nuestros sentimientos en favor de la justicia y que se comprometa nuestra inteligencia en la búsqueda de la verdad y la superación.”  José Narro Robles, rector de la UNAM.

Estimado(a) Candidato(a):

Con toda seguridad que como la gran mayoría de los mexicanos bien nacidos,  estás transido(a) de dolor frente a la tragedia  que enluta a nuestro país. Imagino que en la intimidad de tu casa, con tu familia, repruebas la salvaje conducta de los actores del caso Ayotzinapa.

Lo que allí sucedió, muestra la crueldad extrema que alcanzan las pasiones políticas desbordadas.  Ayotzinapa exhibe los intolerables excesos a que lleva la ambición de poder político y económico en México. Allí se produjeron actos de sevicia. Esta palabra signfica  Violencia Extrema.

Quizá por tu intención de ganar la Candidatura para la Presidencia Municipal no quieres expresar públicamente tus verdaderos sentimientos. Tal vez temes que tus palabras puedan complicar tus elevadas intenciones políticas. Yo solo te advierto que esa reserva egoísta, tan alejada de las preocupaciones y luto populares, te podría traer represalias ciudadanas en las urnas.

Es conveniente que sepas que la infamia de Ayotzinapa nos ha calado profundamente a todos los cajemenses. ¿Sabes que la muerte de esos muchachos estudiantes nos ha hecho conscientes de los muy elevados niveles de violencia e inseguridad que vivimos en nuestro propio municipio?

Todos los días, sin excepción, la prensa local nos informa de dos o más homicidios cometidos en Cajeme. Y no necesito decirte que hay muchos asesinatos que no se reportan pero que los habitantes se encargan de dar a conocer a través de las redes sociales.

Cuando las Autoridades tratan de ocultar información de estos trágicos y reprobables hechos caen el peor de los ridículos. Parecen no darse cuenta de que  incluso la persona más humilde e ignorante, trae teléfono celular y envía o reproduce mensajes.

A los cajemenses nos tiene muy atemorizados la escalada de violencia. Te solicito que tomes nota que ofende a la inteligencia ciudadana que las Autoridades municipales declaren y publiquen que los crímenes, secuestros, extorsiones, asaltos, agresiones y robos ¨han disminuido notablemente en el último año¨.

En serio, Candidato(a): ¿pensarán los gobernantes que los ciudadanos comulgamos con ruedas de molino y que creemos en Santa Claus y en el triunfo electoral de Calderón? Que ellos se crean y aplaudan sus discursos y mentiras no implica que los gobernados tengamos el mismo bajísimo nivel de inteligencia.

Si te cuento sobre la desconfianza ciudadana en las Autoridades y sus informes oficiales, es porque confío en que sabiendo tú la repulsa que nos merece este afrentoso comportamiento, no lo repetirás cuando seas presidente de Cajeme.

Con franqueza te he manifestado en CARTAS CIUDADANAS anteriores que Cajeme muestra los estragos económicos, sociales, urbanos y morales de un estancamiento de más de 30 años.

Con profundo pesar te lo digo: no solo se puede hablar de estancamiento. En algunos renglones, muy sensibles por cierto, podríamos incluso hablar de dolorosos retrocesos.

Sobre estas afirmaciones mías podrás encontrar opiniones que difieran en la extensión temporal del estancamiento y en la intensidad de los efectos que se derivan de esta situación de aletargamiento. Pero que no negarán lo fundamental del asunto: hay estancamiento y retrocesos.

Por cierto: ¿No es muy reprobable que las mismas instituciones municipales no tengan suficiente información histórica, económica y estadística del municipio? La falta de estos registros complica el análisis de nuestra realidad municipal.

Respecto a esta cuestión tan delicada de falta de información, no voy a entrar en discusiones fútiles, Candidato(a). Te la pongo fácil: te invito a que solicites la información económica oficial disponible para decidir con ella lo relativo a una inversión cuantiosa en el municipio. Ya verás tú que la información que recibirás no es suficiente, útil, veraz y actualizada.

Regreso al ambiente actual de terror en que vivimos los mexicanos. No me es necesario profundizar en las causas del problema de la inseguridad del país: me basta con analizar mi entorno municipal. Lo nuestro es un capítulo más de una gran tragedia nacional.  

Es suficiente con analizar nuestro desempeño económico, social y político tan insatisfactorio para entender muchas acciones violentas que no tienen justificación pero que sí tienen explicación: son producto de la desesperación y el encono que engendran la pobreza, la desigualdad, la injusticia, la falta de oportunidades, el desempleo y especialmente la corrupción y la impunidad.

¿Te parece atrevido o equivocado mi diagnóstico, Candidato(a)? Seamos objetivos: Cajeme padece las consecuencias gravísimas que han provocado los gobernantes deshonestos e ineficientes, los políticos falsos y convenencieros y, por supuesto, los ciudadanos permisivos, indolentes y cobardes.

Nuestra culpa ciudadana reside en que no denunciamos oportunamente lo incorrecto y no exigimos en su momento la aplicación estricta de la ley. La omisión es nuestro gran pecado ciudadano. De los cajemenses. De los sonorenses. De los mexicanos.

Si me presionas para que haga un análisis más preciso, creo que la culpa principal recae en nosotros los ciudadanos, que permitimos que el tumor de la corrupción gubernamental y empresarial alcanzara la fase de Metástasis. Lo que ahora sufrimos los cajemenses, los sonorenses, los mexicanos, nosotros mismos lo abonamos con nuestra indiferencia y tolerancia. Padecemos una severísima crisis de valores.

Mis palabras son las palabras no pronunciadas de los cajemenses, sonorenses y mexicanos que están sometidos por el miedo, la vergüenza y la rabia que les provocan los hechos violentos y denigrantes de los últimos años. Creo que las emociones dolorosas y vergonzosas que nos embargan pueden resumirse en la frase lacónica del poeta Sicilia, padre de un joven asesinado en Cuernavaca: ¡ESTAMOS HASTA LA MADRE!

No pensé que alguna vez lo diría y ahora me sale con una profunda y dolorosa convicción: Este Cajeme, este Sonora y este México no son el Cajeme, el Sonora y el México que los cajemenses, los sonorenses y los mexicanos queremos. Estas entidades están lejos de llenarnos de orgullo y satisfacción. Estas entidades que fueron tan nuestras, nos fueron violentamente arrancadas y pervertidas.

Pero la pérdida no debemos asumirla como irremediable. En los ciudadanos radican las opciones de rescate de México, Sonora y Cajeme y debemos ejercerlas con pasión e inteligencia. Por encima de todo, los ciudadanos debemos dar muestra de madurez y decisión y debemos exhibir el brío necesario que demanda la cruzada contra la inseguridad, la violencia, la corrupción y la impunidad.

Estimado Candidato(a), queridos conciudadanos: en las siguientes CARTAS CIUDADANAS comentaré algunas de las más destacadas propuestas de estudiosos de la Ciencia Política y de los simples y siempre bien intencionados ciudadanos que se afanan en recuperar su país, sus instituciones y el Estado de Derecho. Espero merezcan su interés y discusión responsable.