Aunque Ciudad Obregón era en los años treinta (1930 - ) una ciudad muy pequeña, (de oriente a poniente empeza en Plano Oriente y terminaba en la calle Coahuila; de norte a sur limitaba entre la calle Allende y la 200), ya entonces era necesario el servicio de taxis.
Y esa tarea quedó a cargo de varios jóvenes que fundarían conocidas familias, taxistas como Tony Genestas, Vicente Monares, Salvador Inzunza, Simón Munguía y Cruz Picos.
Los taxistas son actores de primera línea en la vida de las ciudades. Ellos lo saben todo, desde las luchas internas por el poder hasta los secretos más íntimos de la gente. Y si no saben lo inventan.
Fue un taxista el que paseó por la antigua Cajeme a José León Toral cuando vino a reconocer el terreno donde vivía su futura víctima, el general Álvaro Obregón. También fue un taxista el que trasladó al "Dijuntito" cuando éste huía después de realizar el primer asalto bancario en esta ciudad.
¿Y qué no sabrán los taxistas de hoy sobre el inframundo que se expande al amparo del crimen organizado?
Aquí vemos a una de las flotillas de taxistas mostrando autos nuevos. La foto fue tomada en una esquina que tal vez usted identifique. Una pista: Allí estuvo el negocio "Mercantil de Televisores", que tuvo entre otros gerentes a José Ramos y era propiedad de don Silvano Rodríguez.
Después siguió siendo una mueblería y ahora es tienda de ropa. ¿Ya adivinó?
Sí, es la esquina noroeste de Galeana y Sonora.