Antes de ser limitado por la cúpula y las columnas actuales, sin fuentes ni luces multicolores, el Discóbolo de la Laguna presidía la entrada al paseo emblemático de Cd. Obregón.
Allí lo pusieron cuando Ángel López Gutiérrez era presidente municipal (1961 - 1964), un trienio en el que también se plantó la cortina de árboles que rodea a la Laguna y se instaló el Danzante Yaqui en la entrada norte de la ciudad. En 1963 adquirió forma el Deportivo "Álvaro Obregón" en terrenos donados por Alfonso Robinson Bours.
Es la época dorada de Cd. Obregón como una de las ciudades más modernas y limpias de México, época que va desde la presidencia de René Gándara (1956) a la de Javier Robinson Bours (1970).
Alrededor del Discóbolo se retrataron miles con sus camaritas Kodak. Sirvió también como escenario para anunciar autos nuevos o lo que se le ocurriera a los publicistas de la época.
Complementaban la escultura los cinco aros olímpicos. En 1963 se anunció que México sería sede de los Juegos Olímpicos de 1968 y había que refrendar el espíritu optimista de esa época.
Allí ha permanecido esta réplica de la obra de Mirón de Eléuteras (450 a. C.), ahora en medio de un entorno muy diferente al de su origen.