En la década de los 1950s hubo movimientos sociales encabezados por mujeres que reclamaban el derecho al voto y en general a la participación política en un mundo regido casi totalmente por hombres.
En aquel entonces no se utilizaba el concepto "equidad de género", ni siquiera el "feminismo", que vino a popularizase en la década de los 70s.
Sin embargo la lucha de aquellas mujeres era genuina y las impulsaba a participar en marchas como la del Día del Trabajo aquel 1 de Mayo de 1956.
El contingente femenino marcha de oriente a poniente sobre la calle No Reelección tras pasar por las vías del ferrocarril, donde hoy está el paso a desnivel.
Con episodios como éste se ha enriquecido la historia de las luchas por la equidad de género.